La infanta Pilar se divierte con sus chicos Juan, Beltrán y Bruno

La infanta Pilar ya ha iniciado sus reuniones familiares pre navideñas. "Con cinco hijos, varias nueras y once nietos nunca me aburro. Y menos en estas fiestas que vienen todos a comer a casa y hay que organizar el plan diario", explicaba hace poco en el Rastrillo de Nuevo Futuro del que es presidenta de honor.
Con todo lo que se le viene encima en el aspecto doméstico se dio un respiro y convocó a tres de sus cinco hijos a un almuerzo familiar en el restaurante Quintín, uno de los locales de moda a mediodía en Madrid.

Juan, Bruno y Beltrán acudieron a la llamada de la jefa del clan Gómez-Acebo Borbón y disfrutaron de un encuentro relajada y con muchas risas según testigos presenciales.

[LEE MÁS: Así es la vida poco convencional de los cinco hijos de la infanta Pilar]

La tía del rey Felipe y sus hijos ocuparon una mesa con vistas a la calle sin preocuparse por el interés que despertaba su presencia entre las personas que paseaban por la calle Jorge Juan. La duquesa de Badajoz invitó a sus hijos y, una vez que terminó el almuerzo, cada uno retomo sus tareas profesionales y familiares. En esta reunión de mamá con sus chicos solo faltó Fernando que se separó de su mujer, la periodista griega y madre de su hijo Nadia Halamandari, tan solo al año de haber contraído matrimonio.

[LEE MÁS: Fernando Gómez-Acebo se divorcia un año después de su gran boda griega]

Más tarde, cuando la hermana del rey emérito salió del establecimiento, tampoco puso pegas para que lo fotógrafos que estaban en la calle dejaran constancia gráfica. Los hijos en cambio no estaban tan relajados como su madre ante el encuentro con los informadores.
Según explicaba doña Pilar en el Rastrillo "mis hijos son menos sociables que yo. Cada uno es como es". Efectivamente la relación con los medios es fría salvo cuando han ofrecido, en exclusiva, celebraciones privadas como fue la segunda boda de Fernando con Nadia Halamnadari o temas relacionados con algunos desajustes laborales.

Como en años anteriores la infanta Pilar abrirá las puertas de su chalet para recibir a la familia al completo, incluido los reyes eméritos. Don Juan Carlos tiene una relación magnífica con su hermana y acude a la convocatoria de Nochebuena o Navidad, dependiendo de cómo se encuentre la situación familiar y afectiva en Zarzuela. Como ha dicho en varias ocasiones don Juan Carlos: "en casa de mi hermana Pilar se come muy bien".