Vestida por Victoria Beckham y a juego con su hermano: Elisabeth de Bélgica brilla en el Día Nacional
La familia real llegaba a la catedral de Bruselas con las tres mujeres luciendo cada una un color diferente, con Elisabeth y Eléonore con vestidos a juego con sus hermanos Emmanuel y Gabriel
Como cada año, Bélgica celebra su Día Nacional este 21 de julio con la familia real visitando la catedral de Santa Gúdula en Bruselas, para asistir a un Te Deum. Hasta allí se han trasladado, con la lluvia como protagonista bajando las elevadas temperaturas de los últimos días, los reyes Felipe y Matilde, que llegaban acompañados de sus cuatro hijos. La princesa heredera Elisabeth, de 20 años; el príncipe Gabriel, de 18; Emmanuel, de 16, y la princesa Eléonore, que ya ha cumplido 14.
Como si cada una de las mujeres de la familia real belga se hubiera pedido un color diferente para jugar a un juego, podíamos ver a una elegantísima reina Matilde vestida de amarillo mostaza. Color de absoluta tendencia esta temporada que ha lucido en un vestido de corte por la rodilla con manga francesa y una capa en el cuello que se frunce también en la cadera. En el pecho llevaba prendida la reina un gran broche de motivo floral que sujetaba dicha capa. Como complementos, la consorte ha lucido una elegante pamela en tono coral -que llevaba sobre un recogido bajo-, con un clutch metálico en el mismo tono y salones en color nude.
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Por su parte, la heredera ha lucido espectacular con un vestido en color rojo de largo midi con escote de pico y unas originales mangas farola de manga corta con aberturas de total tendencia a la altura de los hombros. Un vestido diseño de Victoria Beckham con bajo desigual y falda con cierto vuelo, que le sentaba fenomenal y que ha combinado con una diadema ancha del mismo tono. La heredera lo ha completado con salones de color nude de Jimmy Choo y un clutch dorado prestado de Matilde, muy similares a los utilizados por su madre este jueves. Como joyas ha lucido pendientes largos en color rojo de Christine Bekaert, al igual que el anillo con motivo floral, ambos de estreno.
La pequeña de la familia, Eléonore, que ya ha cumplido 14 años, elegía una viva tonalidad de azul para su vestido de manga corta con bajo desigual a la altura de la rodilla. La joven lucía un semirrecogido en el pelo y un pequeño broche a la misma altura que el que llevaba su madre, que se le tapaba con algunos mechones. Además, ha optado por unas bailarinas del mismo color nude que su madre y su hermana.
El rey Felipe iba vestido con uniforme de gala para la ocasión, mientras que sus dos hijos han optado por un traje de corbata y chaqueta. El príncipe Emmanuel, del brazo de su hermana Elisabeth, lucía una corbata en el mismo rojo que el vestido de la heredera, con la que iba a juego. No tan claro era el caso del príncipe Gabriel, que acompañaba a su hermana Eléonore con una corbata en tonos beis, que -fijándonos bien- tenía estampado paisley con diferentes motivos en azul a juego con el vestido de la pequeña de la familia.
La familia real llegaba al interior de la catedral de Bélgica de dos en dos y hacían una reverencia tres veces en tres posiciones diferentes, para poco después sentarse en la bancada de la primera fila. Junto a ellos, la Casa Real belga confirmaba que se unirían la princesa Astrid y su marido, el príncipe Lorenz, además del príncipe Laurent, que acudía sin su mujer Claire, aquejada de una enfermedad que no se ha precisado y que le fue diagnosticada en 2019.
Ya por la tarde, las celebraciones continuarán con el rey y la reina de Bélgica, a los que también se unirán su hermana Astrid, y su marido Lorenz; el hermano menor, el príncipe Laurent, y -esta vez, sí- la princesa Claire; además de la princesa Delphine, que ya participó el año pasado por primera vez y de forma oficial en las celebraciones del Día Nacional de Bélgica. Todos ellos asistirán al desfile militar que tendrá lugar en la plaza del Palacio, para que los soberanos continúen posteriormente con su agenda en la Fiesta del Parque en el Grand Sablon. Las festividades terminarán con fuegos artificiales en el parque del Cincuentenario.
Este será el segundo año en el que la princesa Delphine, hija reconocida en enero de 2020 por el rey Alberto de Bélgica, que fue producto de su larga relación con la baronesa Sybille de Selys Longchamps, participe ya de forma oficial en las celebraciones del Día Nacional junto a su medio hermano el rey de Bélgica. El año pasado estuvo con su marido, James O’Hare, y sus dos hijos, Josephine y Oscar; y este año repetirá por segundo año en la tribuna para ver el desfile nacional.
Quienes no participarán en ninguno de los actos festivos serán los reyes eméritos belgas, Alberto y Paola, que a sus 88 y 85 años, respectivamente, ya tienen serios problemas de movilidad. La emérita, además, sufrió un ictus en 2018 que la mantuvo alejada temporalmente de la vida pública, y el emérito también era operado esta pasada primavera, por lo que tuvo que permanecer ingresado en el hospital unos días sin que se conociera el tipo de operación a la que fue sometido.
El día anterior, los reyes belgas asistieron a las ocho de la tarde al tradicional concierto de música clásica que fue el preludio de las festividades del Día Nacional. Fue en la sala Henry Le Boeuf del Palacio de las Bellas Artes de Bruselas (el Bozar), a la que también se sumaron el príncipe Laurent, la princesa Astrid y el príncipe Lorenz. La Orquesta Nacional de Bélgica dirigida por Antony Hermus acompañó a la violinista Stella Chen.
Con motivo de esta festividad, el rey belga dio un discurso televisado en el que destacó que “por fin recuperamos nuestra libertad, después de más de dos años de lucha contra el covid”, y aunque aún con casos más controlados, el monarca destacaba que “se reanuda la vida normal”. Un momento complicado para muchos jóvenes, que han sufrido emocionalmente las consecuencias de la pandemia y el aislamiento, por lo que destacó que está “orgulloso del trabajo que hace mi esposa, la reina Matilde, para apoyar la concienciación y la prevención en el campo del bienestar mental”.
Como cada año, Bélgica celebra su Día Nacional este 21 de julio con la familia real visitando la catedral de Santa Gúdula en Bruselas, para asistir a un Te Deum. Hasta allí se han trasladado, con la lluvia como protagonista bajando las elevadas temperaturas de los últimos días, los reyes Felipe y Matilde, que llegaban acompañados de sus cuatro hijos. La princesa heredera Elisabeth, de 20 años; el príncipe Gabriel, de 18; Emmanuel, de 16, y la princesa Eléonore, que ya ha cumplido 14.
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