La buena sintonía de Laurence Debray, biógrafa de don Juan Carlos, con la infanta Elena en Sanxenxo
La presencia de la escritora francesa en la localidad gallega junto al emérito y su círculo más cercano no ha pasado desapercibida
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F049%2F576%2F334%2F0495763346be0195e0edc7e53a5a3278.jpg)
Fue el pasado jueves cuando la infanta Elena decidió viajar a Sanxenxo y reunirse con su padre. La cita de ambos en esta localidad gallega es habitual y a los dos les encanta disfrutar de las regatas. Pero esta vez, la presencia de su hija allí, era importante para el emérito.
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F78c%2F428%2F498%2F78c428498c96c3d529cee4c4652d35d1.jpg)
Tan solo un día antes de la llegada de la infanta Elena, unas fotos comprometidas de su padre con Bárbara Rey habían visto la luz. Tras esta primera estocada al padre de Felipe VI, llegó la segunda, cuando fueron publicados unos audios de conversaciones privadas entre el emérito y la exvedette, generando cientos de titulares y tertulias televisivas desde entonces.
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2Ff29%2Fa07%2F2e2%2Ff29a072e2da5f0b15e7ad83b65159f85.jpg)
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2Ff29%2Fa07%2F2e2%2Ff29a072e2da5f0b15e7ad83b65159f85.jpg)
Tras compartir juntos una cena el jueves por la noche junto a la infanta Margarita; su marido, Carlos Zurita; y la hija de ambos, María Zurita, en casa de Pedro Campos, donde don Juan Carlos se aloja cada vez que viaja a Sanxenxo, el viernes, el padre y la hermana de Felipe VI disfrutaron del mar en la quinta jornada del Trofeo Xacobeo.
Mientras don Juan Carlos lo hacía a bordo del Bribón, su hija Elena se subía a otra embarcación, la lancha Cristina, pero no lo hacía sola. Junto a ella destacó la presencia de una mujer que no pasó desapercibida para nadie. Se trataba de Laurence Debray, la escritora francesa que se está encargando de las memorias del emérito y que también es autora del ensayo ‘Mi rey caído’, sobre la figura de don Juan Carlos.
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F572%2Fa41%2F46c%2F572a4146cdc2226731cb67cf2d73afd9.jpg)
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F572%2Fa41%2F46c%2F572a4146cdc2226731cb67cf2d73afd9.jpg)
En las imágenes captadas por los fotógrafos presentes, se puede ver cómo la cordialidad entre Debray y la infanta Elena es total, compartiendo charlas y risas durante la jornada. Se nota que la escritora goza de la total confianza del emérito y de su círculo más cercano, por lo que su presencia en esta semana tan complicada a nivel mediático para el monarca, habrá sido de gran agrado y habrá servido para que el emérito se sienta aún más arropado.
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F5a4%2F805%2Ff3c%2F5a4805f3c0549315755b00c91a9a6097.jpg)
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F5a4%2F805%2Ff3c%2F5a4805f3c0549315755b00c91a9a6097.jpg)
Por el momento, el abuelo de la princesa Leonor parece vivir ajeno a la polémica. Desde que llegó a Sanxenxo ha guardado absoluto silencio sobre el escándalo por su relación y por sus conversaciones con Bárbara Rey. Ni él ni su círculo más cercano se ha pronunciado al respecto y todos ellos se dedican a disfrutar de su estancia en Galicia mientras amaina la tormenta.
Fue el pasado jueves cuando la infanta Elena decidió viajar a Sanxenxo y reunirse con su padre. La cita de ambos en esta localidad gallega es habitual y a los dos les encanta disfrutar de las regatas. Pero esta vez, la presencia de su hija allí, era importante para el emérito.