Matilde de Bélgica brilla con un vestido de gala con capa y la tiara de diamantes de la reina Fabiola en una cena en palacio
El sultán de Omán ha sido agasajado por Felipe y Matilde de los belgas con una cena de gala en el Palacio de Laeken. La reina ha estrenado un vestido de lentejuelas y ha lucido la tiara Wolfers
La etiqueta de esta noche en el Palacio Real de Laeken, la residencia de los reyes de los belgas, marcaba vestido de gala y tiara para las mujeres. Y así la ha cumplido a rajatabla Matilde, optando por un diseño en azul marino con capa y una joya histórica que perteneció a la española reina Fabiola. Felipe y su esposa han ofrecido un banquete en honor al sultán de Omán, Haitham bin Tariq Al Said, quien se encuentra realizando una visita de Estado a Bélgica.
Como manda la tradición, la primera jornada, en la que el sultán ha sido recibido de forma oficial por los reyes, ha terminado con una cena para la que Matilde ha estrenado un favorecedor vestido de gala firmado por la casa de modas belga Natan, en la que confían tanto la reina Máxima como ella. Se trata de un diseño de silueta recta y escote palabra de honor.
Un modelo sencillo al que ha añadido por encima una capa repleta de lentejuelas. La tela empezaba sobre los hombros, dejando un escote de media luna, y le daba a Matilde un toque regio y a la vez etéreo. Los vestidos capa son tendencia desde hace años y la reina de los belgas ha añadido muchos a su colección, como este que ha estrenado para la cena con el sultán de Omán.
Toca ahora de hablar de las joyas, porque como en toda buena cena de gala que se precie no faltaba una tiara. En concreto, la reina se ha decantado por la conocida como la tiara Wolfers, que fue propiedad de la tía paterna de su marido, la reina Fabiola. Fue un regalo que la española recibió con motivo de su boda por parte de la industria del diamante de Amberes. Fue realizada por la joyería belga Wolfers, de ahí su nombre.
Se trata de una joya muy versátil, ya que puede utilizarse también como collar. Realizada en platino, está formada por dos hileras de diamantes, talla brillante, sobre los que se disponen cinco grupos de tres diamantes con talla en pera. Fabiola dejó la tiara en herencia a la mujer de su sobrino, la reina Matilde, quien la estrenó en 2015 durante una visita de Estado a Polonia.
Matilde la ha lucido como collar en varias ocasiones. Y fue también la tiara que eligió la princesa Elisabeth de Bélgica para un acto internacional muy simbólico. La duquesa de Brabante acudió a la cena de gala con motivo del 18 cumpleaños de Christian de Dinamarca, en octubre de 2023, portando esta pieza, que ahora ha recuperado su madre para esta cena de gala.
La etiqueta de esta noche en el Palacio Real de Laeken, la residencia de los reyes de los belgas, marcaba vestido de gala y tiara para las mujeres. Y así la ha cumplido a rajatabla Matilde, optando por un diseño en azul marino con capa y una joya histórica que perteneció a la española reina Fabiola. Felipe y su esposa han ofrecido un banquete en honor al sultán de Omán, Haitham bin Tariq Al Said, quien se encuentra realizando una visita de Estado a Bélgica.
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