Athina Onassis pierde su móvil y ofrece una recompensa de 5.000 dólares

Cuando nació hace 28 años, a Athina Roussel Onassis le bautizaron como ‘la niña más rica del mundo’. Y no iban mal encaminados, porque cuando en 1988 murió su madre, Cristina, la única hija del armador griego Aristóteles Onassis, le dejó una herencia de 2.700 millones de euros.

Athina nunca ha estudiado en la universidad, por lo que un equipo de asesores pertenecientes a la Fundación Onassis vela por sus propiedades, mientras ella ejerce de amazona. En su última visita a Barcelona, el pasado fin de semana, durante la edición número 102 del Concurso Internacional de Saltos, la joven protagonizó la gran anécdota de esta edición, ya que perdió su móvil en las caballerizas.

Al percatarse de lo sucedido, y consciente de la gran cantidad de números de teléfono de gente influyente y, sobre todo, de las fotos y vídeos personales que el aparato contenía, decidió ofrecer una recompensa. Su marido, el también jinete Doda Miranda, trabajó con ella para recuperar el valioso objeto perdido. En el box de la selección brasileña, la multimillonaria colgó una nota de su propio puño y letra en el que ofrecía 5.000 dólares a quien le entregara el celular. Todo ocurrió el 29 de septiembre, último día del torneo.

A buen seguro que por su mente pasaron las malas experiencias padecidas por Scarlett Johansson, cuando un individuo hackeó su móvil llegándose a publicar algunas fotos de la actriz posando desnuda o las imágenes que se filtraron de la cantante Christina Aguilera también semidesnuda. En terreno patrio, numerosos famosos como Pipi Estrada, Lequio, Maria José Campanario o Mario Vaquerizo fueron víctimas de un troll que filtró sus números de teléfono a través de las redes sociales. Finalmente todo quedó en un susto, y Athina recuperó el móvil, sin que haya trascendido si se vio obligada a realizar el desembolso de la cantidad prometida en la nota.

La amazona sigue siendo un misterio para el gran público. Nunca ha concedido una entrevista, evita a los fotógrafos constantemente y huye de la maldición de los Onassis y su entorno. Su abuela Tina Livanos se suicidó; su madre falleció oficialmente por un edema pulmonar, aunque se comentó que el motivo real fue su adicción a las drogas y sus constantes dietas para perder peso; su tío Alexander falleció en accidente de aviación y la exmujer de su marido, Cibele, también se quitó la vida.