Las claves de Isabel Preysler para decorar una casa elegante

Elegante en el vestir, en el hablar y actuar, todo en Isabel Preysler rezuma un saber estar que la socialité ha sabido proyectar también en la decoración de su casa. Un hogar en el que ha vivido junto a sus hijos, algunos de los cuales todavía permanecen, como Tamara, quien se marchó, volvió y ahora, cuando tenga su nueva casa lista, de nuevo emprenderá el vuelo. Ana Boyer, por su parte, aprovecha sus visitas para quedarse con Isabel, sintiendo como propio este hogar.

La casa que Isabel comparte con Mario Vargas Llosa, su pareja desde hace tiempo, es un pequeño refugio para toda la familia y refleja los gustos de la empresaria. A todos los detalles se ha prestado atención, no dejando nada al azar, desde las obras de arte que cubren las paredes a los muebles seleccionados para vestir la casa, pasando por la vajilla que utilizan durante el día a día y que es una estupenda fuente de inspiración. La serenidad y elegancia de Preysler la acompaña en todos los aspectos de su vida, también al decorar.

Entrar en casa de Isabel Preysler seguramente sea un sueño para muchos de sus admiradores. Gracias a las redes sociales de sus hijas hemos podido colarnos dentro de algunas de sus estancias y así conocerla un poco mejor. Solo el recibidor bien merece que hagamos una pausa, con cuidados detalles como el suelo en damero, el arco de la puerta o la espectacular luz que entra por la ventana lateral. El mobiliario que se aprecia es de calidad, con personalidad y con historia, y poco sorprende que tenga un espejo, pues siempre que sale de casa luce perfecta.

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Una buena estructura

Más allá de una cuidada decoración, lo que se puede apreciar es que la casa de Isabel tiene una buena estructura que le sirve como base. Una gran superficie en metros cuadrados, con techos altos y grandes ventanales que ayudan a que la luz entre a raudales en su casa, una forma ideal de que los espacios, ya de por sí de gran tamaño, luzcan aún más amplios. Podemos apreciar cómo cada estancia tiene su propia personalidad, sus detalles cuidados.

No toda la casa luce el mismo suelo, hay zonas en las que este es de madera clara, otros en los que es de madera oscura -un elegante contraste con las paredes, que siempre son en tonalidades neutras-, también hay estancias en los que son cerámicos. Lisos, pero también algunos con elegantes diseños similares al de la entrada. Algunos suelos están cubiertos por grandes alfombras, para hacer la estancia más agradable y proteger la belleza natural de los diseños que se esconden bajo ellas.

Los marcos de las ventanas parecen de madera, con arcos y diseños estilosos que ayudan a sumar valor a la casa, así como para lograr que quienes están dentro tengan unas vistas inmejorables del jardín.

El rincón preferido

Estancias diseñadas para ser lugares de descanso, de reunión o de trabajo, pues la misma zona puede usarse para tomar el té o para una entretenida y reconfortante sesión de yoga, como sucede con este rincón, uno de los preferidos de Tamara. No es sorprendente, pues se trata de una espectacular piscina cubierta, rodeada por grandes cristaleras y, sobre todo, diferentes zonas de descanso y relax.

Decorada con sofás y sillones que invitan a la desconexión, parece que es también un lugar clave para Ana, donde aprovecha para reflexionar y para hacer un poco de ejercicio. Aquí ambas hermanas encuentran un rincón en el que dejar los problemas y preocupaciones a un lado. En él disfrutan de una conexión especial con la naturaleza, que se cuela a través de las ventanas y recargan energías con la luz que entra por los ventanales.

Detalles deco en casa de Isabel Preysler

Los muebles que se pueden apreciar en las instantáneas que van compartiendo son de diseño clásico. Si bien encontramos algún toque un poco más moderno, en algunos complementos como las lámparas o los marcos de los espejos, las estancias que nos dejan ver tienen esa belleza eterna que aportan los muebles de diseño tradicional, de madera con detalles labrados, con tapizados que pueden actualizarse con el tiempo. Destacan también los pesados cortinajes que enmarcan las ventanas y separan algunas habitaciones.

Muebles cuidados y escogidos que, a pesar de ser atemporales, no nos llevan al pasado, pues los detalles actuales con los que se mezclan hacen que la casa resulte moderna. Las paredes de colores claros, las elegantes molduras en las paredes y los candelabros que emplean para decorar suman estilo y aportan personalidad. Como también lo hacen las plantas y flores que se pueden ver en diferentes estancias y lugares.

Un jardín no es suficiente, los amantes de la naturaleza necesitarán que esta entre dentro de casa también, por eso siempre parece un buen momento para regalar flores, o ser quien las recibe. Los libros también ocupan un lugar destacado dentro de esta casa, cubriendo las paredes, llenando estantería tras estantería, ocupando toda la estancia pensada para ellos hasta conseguir una biblioteca que cualquiera envidiaría. Solo hay que ver que tienen una escalera que les ayuda a alcanzar los estantes superiores, sin duda una ventaja extra de las casas con techos altos, no hay límite para colocar los libros.

Estupendos jardines, espacios exteriores que merecen la pena y un interior diseñado para resultar elegante, pero en el que los peques de la casa no tienen miedo a jugar y divertirse. Nos falta por ver, eso sí, alguno de los muchos aseos de los que siempre se habla cuando se menciona Villa Meona.