¿Puede ser Victoria Federica considerada un referente de estilo? Hablan los expertos

Desde que abriese su cuenta de Instagram, hace poco menos de un año, Victoria Federica se ha establecido como la revolución de la temporada 2022 en el universo de las redes sociales. Tras sumar más de 250.000 nuevos seguidores y fichar por una de las agencias de representación de influencers más punteras de nuestro país, la nieta del rey emérito se ha convertido en una de las principales invitadas a los desfiles de Semanas de la Moda a nivel internacional, se ha fotografiado con Rihanna e incluso ha protagonizado portadas de las cabeceras más vendidas.

La hija de la Infanta Elena y Jaime de Marichalar ha confesado querer dedicarse profesionalmente a la moda, universo que, según sus propias palabras, le "apasiona”. Sin embargo, el ‘boom’ provocado en la industria le ha regalado la misma cantidad de defensores que de detractores. Las apariciones de la joven son criticadas con severidad en las redes sociales, algunos no perdonan su pasado de adolescente rebelde y otros no comprenden cómo se puede dedicar a un mundo en el que no se encuentra formada. Por ello, Vanitatis ha decidido recurrir a la opinión de los expertos del sector para que analicen la figura de la royal española y despejen la duda principal generada dentro del debate social: ¿puede ser Victoria Federica considerada un referente de estilo?

La estilista de famosas Antonia Payeras lo tiene claro: “Victoria Federica es el ejemplo de cómo los medios de comunicación tienen el poder a la hora de ensalzar a los personajes públicos y determinar qué interesa. A pesar de encontrarse en primera línea, aún no se ha ganado ese puesto al 100%; es joven y tiene mucho tiempo para conquistarlo”.

Una línea de opinión que también sigue Alberto Espinosa, subdirector de la revista ‘Fearless’, que además añade un matiz: “Acaba de empezar. La posición de interés la ocupa sobre todo en las revistas del corazón. Ella lo poco que ha hecho en moda lo ha hecho más por ser 'hija de' que por tener una influencia real en la industria. Recordemos que su padre es un asiduo a los desfiles de París desde los años noventa y debe haberle enseñado algunos valores”.

La figura de Jaime de Marichalar y su gusto por la moda es la primera clave del fenómeno de Victoria Federica en la que coinciden todos los expertos. “No creo que se pueda decir que Victoria Federica 'ocupe una posición' en la moda. Simplemente es una joven a la que le interesa la moda debido a su entorno y especialmente a su padre”, afirma Yolanda Sacristán, directora general de ‘The NewsRoom’.

Por otro lado, su compañero Carlos Roca, asesor de imagen de firmas de lujo en la boutique Experience 27, se muestra más crítico con su entrada en el sector: “Victoria Federica se ha colocado en el panorama nacional de influencers de la misma forma que le ha venido todo en la vida: cómodamente. Su intento de involucrarse con la moda no es sino el resultado de recomendaciones de padrinos y contactos de su entorno”.

El beneficio de ser 'royal'

Sin embargo, es Adrián Corchero, analista de marketing, el encargado de dar luz al porqué del éxito de la nieta del rey emérito en las redes sociales: “Victoria Federica introduce elementos únicos por estar vinculada a la monarquía española. Más allá de sus apuestas en moda, su persona acerca la institución a la sociedad desde una perspectiva desenfadada que rompe esquemas. Este factor es exclusivo a su perfil”.

La simbiosis de la cara más ‘fashion’ de la red y el universo de las familias reales parece un movimiento cada vez más común. “Olympia de Grecia, Carlota Casiraghi…estamos en un momento en el que las royal influencers son tendencia. En España no teníamos una y nos teníamos que posicionar de alguna manera”, reflexiona Antonia Payeras sobre el ‘boom’ provocado por la joven.

“Victoria Federica cuenta con dos fortalezas principales intrínsecas a su persona. Por una parte, su presencia en medios no depende en exclusiva de su interacción con el público y las marcas, ser un miembro de la familia del rey juega como un componente independiente y potenciador de su exposición mediática. Es decir, Victoria Federica es visible sin importar el éxito de su trayectoria como referente de estilo. Por otra parte, cuenta con un equipo, unos recursos y una realidad que le permiten explotar su imagen al máximo”, analiza Adrián Corchero esta nueva realidad. Y aporta un dato revelador: las royal influencers no tienen por qué desenvolverse bien en la moda para conseguir visibilidad, esta es algo intrínseco en ellas.

Aciertos y errores

Por ello, los looks de la hija de la Infanta ocupan, independientemente de su corrección, un espacio dentro de los medios de comunicación. “En ocasiones acierta y en muchas otras se queda corta. Contando con que tiene a su disposición todas las grandes firmas de lujo internacionales, no creo que sea meritorio el modo en el que las defiende. Lleva piezas espectaculares como el mono blanco con estampado floral de Saint Laurent, pero lo desmerece con sus fotografías de carácter taurino, que nada tienen que ver con la filosofía de la firma francesa”, apunta el estilista Carlos Roca.

Afirmación con la que no está de acuerdo la Brand Manager de Forbes Woman, Yolanda Sacristán: “Sus looks son muy acertados y tiene estilo. En mi opinión, Victoria Federica sabe llevar las tendencias y elegir los looks que le favorecen. Además, tiene cuerpo y altura de modelo y la ropa le sienta bien”.

“Tiene buen físico; por lo tanto, talla de modelo. Así que hay poco que ajustar y resulta fácil y efectivo. La alta costura es fundamentalmente publicidad y teniendo en cuenta que con ella la presencia en muchos medios está asegurada, pues es lógico que la quieran y requieran. Además, es divertida, es consciente de todo pero a la vez todo le da igual, ha crecido pisando la tierra, pero a la vez también las moquetas de palacio”, asegura Alberto Espinosa, subdirector de ‘Fearless’, que desvela así no solo el porqué de su vinculación con las firmas más lujosas, sino también uno de los puntos fuertes de la imagen de la joven: su naturalidad.

Además, decide añadir otra de las piezas del puzzle: “Nada es para siempre y menos en moda. En la moda necesitamos continuamente caras nuevas, aporta frescura, aunque poca, pero actualmente es necesaria. Hubo moda sin ella y la puede haber. Los nombres importantes son otros y efectivamente sin ellos la moda no sería moda”. El ‘boom’ generado es resultado de un mundo de sobreinformación que provoca un hastío rápido en los personajes más explotados, hecho del que la joven misma podría ser víctima en unos años.

Un perfil de carácter conservador

Sin embargo, a pesar de esta regeneración que podría estar suponiendo para la industria, todos los expertos coinciden en el carácter conservador de su perfil. “Evoca el regreso de estilismos patrios que podíamos ver en las portadas de revistas del corazón durante los 90 y los 2000. Es una extensión del estilo de su madre, reinterpretado y adaptado a la era Instagram, pero dejando claro sus ideales y modo de vida”, argumenta el asesor de imagen Carlos Roca.

Una idea que concuerda a la perfección con las conclusiones extraídas por el experto en marketing Adrián Corchero tras analizar la cuenta de Instagram de la joven. “Victoria Federica abarca un target femenino con un amplio rango de edad, comprendido entre los 16 y los 50 años, que no arriesga por nuevas formas de expresión en moda, sino que asocia la belleza, la elegancia y el estilo a sus formas más tradicionales y evidentes”.

Las consecuencias de la falta de experiencia

Aunque, por otro lado, los profesionales del sector afirman que observan giros de imagen poco coherentes debido a la juventud y escasa experiencia en la moda de la royal española. “Su estilo es cambiante, aún tiene que buscar su sitio. Va un poco de prestada y se nota. Le aconsejan estilistas con mucha mala leche. Yo no soy estilista, pero si tengo mala leche le diría que fuese consciente de las limitaciones; no todo es para todos. Estoy seguro de que ella con alguna ropa no se ha sentido cómoda y, o estás cómoda, o te conviertes en un maniquí sin sentido”, sentencia Alberto Espinosa.

En este terreno, la estilista de celebrities Antonia Payeras lanza una recomendación a la joven: “A mí me encanta cuando se ve su faceta más casual y desenfadada, como en la cena de Off-White en Ibiza. En los photocalls me pierde su esencia porque creo quieren aparentar una imagen más formal y sobria. Por ejemplo, el vestido azul de terciopelo de Caprile, que era impresionante, no considero que defina a una chica de su edad”.

“Nadie nace sabiendo, hay que darle tiempo. La vida es un aprendizaje. No le puedes pedir la luna a una joven de 20 años. Para tener un buen recorrido en la moda se necesita educar mucho los sentidos, el ojo, la mente y ver sin parar todo. La moda es una gran evaluación continua que nunca cesa, nunca hay vacaciones”, dice el subdirector de ‘Fearless’.

Su futuro en la industria

Yolanda Sacristán se muestra positiva en cuanto a su evolución: “Ahora mismo es una joven interesada en la moda y con estilo. Más adelante, quizás cuando tenga más edad y tenga un estilo más definido, sí podría llegar a ser un referente y una mujer influyente, como lo es su tía doña Letizia”.

A pesar de que en estos momentos nadie la considera un referente de estilo dentro del sector, los expertos no niegan la evidencia: “Ella puede influir en las tendencias de sus seguidoras, claro está. Ella publica un vestido low cost con una foto bonita y lo agota; es lícito y lógico”, explica Alberto Espinosa.

Con tan solo 21 años, su camino profesional aún es largo. “Es muy joven, va a seguir puliéndose y va a tener una carrera muy prometedora llena de éxitos”, dice Antonia Payeras. “Seguirá despertando interés en los medios y continuará colaborando con firmas que encuentren alguna forma de negocio con el público que la sigue”, continúa Carlos Roca, a lo que la directora de ‘The NewsRoom’ añade: “Si lo desea, tendrá recorrido dentro del mundo de la moda”.