Es noticia
Menú
Beber en porrón, bocadillo de sardinas... En gastronomía también triunfa lo retro
  1. Estilo
  2. Ocio
moda 'FOODIE'

Beber en porrón, bocadillo de sardinas... En gastronomía también triunfa lo retro

Nos ponemos nostálgicos hasta en la mesa. El 'revival' ha llegado a la hora de comer: pedimos un pepito de ternera o un plato combinado. Todo va a juego con el ancho de nuestros pantalones

Foto: El Lovnis rinde culto a la vajilla Duralex, los platos combinados y la tarta Comtessa
El Lovnis rinde culto a la vajilla Duralex, los platos combinados y la tarta Comtessa

En los asuntos del comer y el beber también nos estamos poniendo nostálgicos. Nos está saliendo la pata de elefante, los flecos, el zueco y el blusón.Después de tanta gozosa experimentación y futurismo hasta en la sopa, resulta que se sientan a nuestras mesas gloriosos protagonistas de nuestro pasado reciente. De cuando fuimos carne de picnic. Hablamos del porrón, los bocadillos de sardinas, los pepitos de ternera, los platos combinados y los perritos calientes, por supuesto, en clave gourmet, que ahora somos más sibaritas. Te decimos dónde encontrarlos.

EL PLATO COMBINADO Y UN HOMENAJE AL BAR-CAFETERÍA

Nada de gastrobar ni bistró ni barra informal, Lovnis viene como de otro planeta a recordarnos el glamour del bar-cafetería de siempre abierto a todas horas, y a poner sobre la mesa un asunto de vital importancia (para nuestros estómagos): el plato, aquí platillo, combinado. Un mítico formato que es como la pata de elefante de la gastronomía, y que Álvaro Castellanos e Iván Morales, padres de la taberna Arzábal, han rescatado de sus mejores recuerdos (y los nuestros). Los platos conocidos por sus números vienen de entonces a engordarnos el verano de ahora.

El espacio. Decoración extraterrestre para un garito que se llama Lovnis, el resultado de juntar el amor (love) con los objetos voladores no identificados. Y servido todo en bandejas de comedor de colegio, viejos platos Duralex y copas de metal. No se podía pedir mejor bálsamo para nuestras morriñas. Para celebrarlo, hay DJ y coctelería poscena.

Pídete. El número 1 es la réplica de un clásico: huevos fritos, pimientos y patatas. También los hay de nuevo cuño, como el de pollo picantón asado a la rotí con verduritas a la plancha y salsa romesco. No falta lo retro ni en el postre: limón helado o tarta Comtessa.

Dónde: C/ General Pardiñas, 56. Madrid.

PERRITOS CALIENTES EN UN BAR NOCTÁMBULO Y GAMBERRO

El Pollo Gamberro luce el gamberrismo de ese chef iconoclasta hasta en las formas que es SergiArola, el rey del mambo gourmet que ha vuelto a extender sus dominios con una pollería donde el ave de corral se ofrece en plan delicatesen (procede de una granja de Palencia y se asa en horno de carbón ecológico), incluso para llevar. Y esto es solo el principio deuna aventura un tanto revival que nos lleva al sótano con nocturnidadpara embriagarnos de rock and roll, con actuaciones en directo, incluida la del propioArola, y alimentarnos con perritos calientes a nuestra medida.

El espacio. Donde se sirven los perritos, los cócteles y el rock es una cueva en toda regla en la planta baja que se llama Let’s Dog. Arriba, todo hace indicarque el pollo es el protagonista.

Pídete. Un perrito a la carta, con salsas picantes, cheddar, cebolla crujiente, guacamole; pollo asado (entero o por partes) con aliño especial o pollitas de corral;nuggets, muslos encebollados o canelones como entrantes, y ensaladas y guarniciones varias, como patatas gajo o tomate asado a la provenzal, y salsaspara acompañar.

Dónde: C/Barquillo, 34. Madrid.

PEPITOS DE TERNERA, BOCADILLOS DE SARDINAS Y UN PORRÓN

No hay forma de beber más quijotesca (y circense) que la de empinar el codo con el porrón y bordar el chorro hasta su desembocadura en propia boca. Tanto lo es que la redoma de cristal tiene hasta panza y es la protagonista de la nueva aventura (léase taberna informal) de Juanjo López Bedmar, a quien le debemos La Tasquita de Enfrente. Lo que ha hecho ahora es todo una maniobra retro, porque El Porrón Canalla es, además de un templo del porrón, una bocadillería.

El espacio. Está a solo unos metros de La Tasquita, es su versión relajada y callejera, y ocupa el local en el que estuvieron el Chogüí y el Scorpios, dos serrallos de la mítica y 'canalla'calle Ballesta. Los suelos son de cemento pulido, las mesas y bancos de madera natural, y en las paredes, grafitis.

Pídete. Un bocata de calamares “de verdad” o de carrillera con huevo duro, un pepito de ternera, un “bocalatas” de mejillón con patatas o de sardina con cebolla, o un bocadillo de chocolate con sal y aceite. Los porrones los hay de cerveza, tinto de verano, vino tinto, blanco o manzanilla, pequeños o grandes.

Dónde.C/Ballesta, 2. Madrid.

En los asuntos del comer y el beber también nos estamos poniendo nostálgicos. Nos está saliendo la pata de elefante, los flecos, el zueco y el blusón.Después de tanta gozosa experimentación y futurismo hasta en la sopa, resulta que se sientan a nuestras mesas gloriosos protagonistas de nuestro pasado reciente. De cuando fuimos carne de picnic. Hablamos del porrón, los bocadillos de sardinas, los pepitos de ternera, los platos combinados y los perritos calientes, por supuesto, en clave gourmet, que ahora somos más sibaritas. Te decimos dónde encontrarlos.

Restaurantes Verano
El redactor recomienda