Comer las manzanas con piel puede ayudarte a adelgazar y te contamos por qué
Descubre cuál es la mejor forma de comer manzanas para aprovechar al máximo sus beneficios
Puede que hayas escuchado alguna vez que tomar una manzana al día es beneficioso para tu salud. Este es un dicho habitual en la cultura anglosajona y, en su versión original, incluso cuenta con una pegadiza rima que por desgracia se pierde en la traducción.
Que en español no se aprecie el verso no lo convierte en menos real, se ha demostrado que incluir esta fruta en nuestra dieta puede aportar grandes beneficios para nuestra salud, gracias a las muchas cualidades que las manzanas tienen.
Uno de ellos es que resulta muy diurética. Gracias a estar compuesta en un 80% de agua puede ayudarnos a eliminar el exceso de líquido, y con él aquellas toxinas que nuestro cuerpo no necesita y que no conviene acumular.
Es buena para el corazón, su alto contenido en potasio hace que se reduzca el riesgo de sufrir problemas cardiacos, pero también para el fortalecimiento de los huesos gracias a su alta concentración en flavonoides.
Protege nuestro cerebro, gracias a los antioxidantes que contiene, que ayudan a prevenir el prematuro envejecimiento de sus células y también a reducir los niveles de colesterol malo.
Repasando todo esto, parece que quedan pocas dudas de las muchas ventajas que las manzanas tienen sobre nuestra salud, sin olvidarnos de las vitaminas y minerales que contienen, tal y como sucede con todas las frutas. Sin embargo, también pueden ayudarnos a cuidar nuestra figura, sobre todo si las tomamos con piel.
Puede que hayas escuchado que es mejor tomar las frutas enteras que en zumo, esto es así porque al exprimirlas perdemos gran parte de la fibra que contienen y, por tanto, de sus propiedades. Sin embargo, hay algunas frutas que no solo conviene comerlas enteras, también con su piel.
La piel de la manzana es rica en fibra y pectina y contiene ácido ursólico, que también podemos encontrar en la de otras frutas como la pera, las ciruelas o los arándanos.
La fibra favorece la sensación de saciedad y es de digestión lenta, por lo que ayuda a que pasemos más tiempo sin sentir hambre y evitemos la necesidad de picotear productos poco saludables. Por su parte, la pectina ralentiza la absorción de determinados nutrientes, como los azúcares refinados o las grasas, esto nos ayuda a regular sus niveles en el organismo.
Sin embargo, es el ácido ursólico el que más beneficios puede aportarnos a la hora de perder peso porque favorece el crecimiento muscular, protegiendo los músculos del desgaste y el aumento de la grasa marrón, tal y como han demostrado estudios realizados por el equipo de Christopher Adams en la Universidad de Iowa (EEUU).
Un aumento de los niveles de masa muscular y de grasa marrón puede provocar una mayor quema de calorías, lo que nos ayudara a cuidar nuestra línea. Además, el ácido ursólico activa el colágeno de la piel, combate el envejecimiento, es un antiinflamatorio natural y regula los niveles de colesterol y de glucosa en sangre.
Parece que está claro, lo mejor que puedes hacer es lavar bien esta fruta y comerte la manzana entera, con su piel y, si puede ser, mejor a bocados y con calma, esto puede ayudarte a quemar algunas calorías más.
Puede que hayas escuchado alguna vez que tomar una manzana al día es beneficioso para tu salud. Este es un dicho habitual en la cultura anglosajona y, en su versión original, incluso cuenta con una pegadiza rima que por desgracia se pierde en la traducción.