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Por qué todos estamos enamorados de la misma mujer: Adriana Ugarte
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se estrena 'enamorado de mi mujer'

Por qué todos estamos enamorados de la misma mujer: Adriana Ugarte

La cinta francesa, que llega este viernes a los cines, es una de las incursiones internacionales de la actriz, que a sus 33 años vive su mejor momento profesional

Foto: Adriana Ugarte en una fotografía para Vanitatis. (Enrique Villarino)
Adriana Ugarte en una fotografía para Vanitatis. (Enrique Villarino)

Hace ya unas cuántas décadas, las fantasías calenturientas de un señor casado hicieron reír a medio mundo. 'La tentación vive arriba' mostraba, a partir de un éxito teatral de Broadway, lo mucho que puede sufrir un rodríguez cuando su mayor problema no es el calor veraniego del Manhattan de los 50; cuando su sufrimiento viene de la dicotomía entre su mujer y la sexy vecina que vive encima de su piso. Nada raro si esta tiene el rostro de Marilyn Monroe. Algo parecido le ocurre a Daniel Auteuil en la cinta que ha dirigido y protagonizado, 'Enamorado de mi mujer'. La historia es simple: un editor agasaja a su amigo Patrick (Gérard Depardieu) y a la novia de este, Emma, encarnada por una apolínea Adriana Ugarte, con una cena. La presencia de la joven despertará en él todo tipo de ensoñaciones. La narración transcurre durante esa cena y el espectador nunca está seguro de dónde está el límite entre la realidad y la fantasía.

[LEER MÁS: El 'verano del amor' de Adriana Ugarte]

placeholder Ugarte en 'El hormiguero' para promocionar 'Enamorado de mi mujer'.(Cordon)
Ugarte en 'El hormiguero' para promocionar 'Enamorado de mi mujer'.(Cordon)

Lo que resulta verosímil, dentro de un argumento que podría ser machista pero no lo es, es que Auteuil pueda perder la cabeza por una Adriana que, al contrario que aquella Marilyn (los tiempos han cambiado), es lo suficientemente inteligente como para sortear las provocaciones de cualquier depredador. La cinta francesa, que llega este viernes a los cines, es una de las incursiones internacionales de la actriz, que a sus 33 años vive su mejor momento profesional y se ha convertido en una de esas intérpretes que no solo son guapas, sino que derrochan inteligencia y sensibilidad cada vez que abren la boca. Como dirían las abuelas de antes, Adriana 'tiene ángel' y eso es algo de lo que no todas las guapas pueden presumir. Sexy, pero también dulce. Inteligente pero no solo cerebral, sino con una capacidad brutal para apelar a nuestras emociones.

Hace unos cuatro años, este medio acudía a un acto publicitario con la actriz. Transcurría el verano de 2014 y una de las preguntas obligadas tenía que ver con el recuerdo de los veranos de su vida. La respuesta podría resumir a la perfección la personalidad de Adriana. “Esas tardes en las que olía a jazmín, llegaba la hora de ducharse y tenías la sensación de que los días son eternos, estás feliz y te sientes en familia”, nos decía. Por entonces, ya había sido la Sira Quiroga de 'El tiempo entre costuras' (2012) y vivía en la cresta de la ola, siendo el gran descubrimiento actoral de esa temporada. Ya entonces barajaba los pros y los contras de una carrera internacional. Sobre todo en Hollywood, lugar donde ya ha rodado. “Lo de llegar hasta allí no lo veo como un salto, sino como la posibilidad de compaginar trabajos interesantes fuera y aquí en España, donde creo que hay muchas posibilidades y personas que mueven proyectos muy buenos a pesar de la crisis que hay”.

placeholder Adriana en una imagen de archivo. (EFE)
Adriana en una imagen de archivo. (EFE)

La prensa del corazón también se había fijado en las directrices de su vida. Su noviazgo con Álex González, el realizador de cine Luis Blasco o Gonzalo, un técnico de iluminación, la convirtieron en protagonista de varias portadas. También la supuesta enemistad con Emma Suárez durante la promoción de la 'Julieta' de Almodóvar. Ella, con una serenidad poco habitual, ha sabido pagar esos peajes como parte de su profesión, sin perder la calma y provocando que siempre se hable más de su trabajo que de su vida. Y, como bien saben muchos de sus compañeros de profesión, no es algo fácil de conseguir.

De 'La señora' a 'Palmeras en la nieve', esta apasionada de lo vintage ha logrado muchos reconocimientos que van más allá de su belleza. Entre ellos, que el cine internacional (y de autor) se fije en ella. Cuando hace un par de años 'El Mundo' le preguntaba si se mudaría definitivamente (ante los rodajes previstos en Perú, Francia y Hollywood), ella tenía claro que su centro emocional siempre será Madrid. “Ir y venir tal vez. ¡Que tengo dos perritas y una casa nueva en el campo, hombre!”.

placeholder Adriana Ugarte en 'El tiempo entre costuras' (Antena 3).
Adriana Ugarte en 'El tiempo entre costuras' (Antena 3).

Años después, por fin podemos disfrutar de uno de sus primeros trabajos fuera de nuestro país. Gérard Depardieu y Daniel Auteuil, compañeros de fatigas en 'Enamorado de mi mujer', no serán los últimos que caigan rendidos a sus pies. Y sin necesidad de que la ráfaga de una rendija de metro suba unos cuantos centímetros su falda, tal y como ocurría con aquella Marilyn a la que, por cierto, también amaremos eternamente. Tal y como ya amamos a Adriana.

Hace ya unas cuántas décadas, las fantasías calenturientas de un señor casado hicieron reír a medio mundo. 'La tentación vive arriba' mostraba, a partir de un éxito teatral de Broadway, lo mucho que puede sufrir un rodríguez cuando su mayor problema no es el calor veraniego del Manhattan de los 50; cuando su sufrimiento viene de la dicotomía entre su mujer y la sexy vecina que vive encima de su piso. Nada raro si esta tiene el rostro de Marilyn Monroe. Algo parecido le ocurre a Daniel Auteuil en la cinta que ha dirigido y protagonizado, 'Enamorado de mi mujer'. La historia es simple: un editor agasaja a su amigo Patrick (Gérard Depardieu) y a la novia de este, Emma, encarnada por una apolínea Adriana Ugarte, con una cena. La presencia de la joven despertará en él todo tipo de ensoñaciones. La narración transcurre durante esa cena y el espectador nunca está seguro de dónde está el límite entre la realidad y la fantasía.

Adriana Ugarte
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