Xandra Falcó: de ser la mano derecha de su padre a su espantada empresarial
Ha sido durante muchos años la mano derecha del marqués en el negocio del vino, al que siguió la comercialización del aceite
A diferencia de otros hijos de famosos, Xandra Falcó y sus hermanos no han hecho del apellido paterno una forma de vida. La más mediática ha sido Tamara, pero en su caso por la vertiente materna (Preysler). Ninguno ha querido entrar en el desagradable desencuentro que protagonizaron el marqués de Griñón y su mujer, Esther Doña, en un hotel de Madrid en febrero pasado. Una discusión que acabó con el aristócrata en la comisaría y sin denuncia ratificada por parte de su consorte.
Después de este incidente, la pareja aseguraba que todo estaba en orden, una afirmación que contrastaba con la opinión de algunas amistades que consideraban que, al menos en reuniones informales, Falcó y Doña no se encontraban en su mejor momento. Una apreciación que se complicaba aún más por el nulo trato de los cinco hijos del marqués con la cuarta esposa de su padre.
El marqués de Griñón se reúne habitualmente con sus hijos a comer o en la finca de Casa de Vacas, donde se recluyó tras la bronca con Esther. Nunca acuden a la casa palacio El Rincón, donde se encuentra la vivienda habitual de la pareja. Los hijos son discretos y salvo Tamara, que en su día hizo un breve comentario en el que decía que había dado muchas oportunidades a su madrastra, el resto se ha mantenido en silencio y a lo más que han llegado ha sido a dar las gracias por el apoyo de amistades y prensa tras el paso de Griñón por la comisaría.
Xandra, la mayor de las chicas, ha sido durante muchos años la mano derecha de su padre en el negocio del vino, al que siguió la comercialización del aceite. Su hermano Manolo, que trabaja en la banca privada y ostenta varios cargos en las empresa paternas, supervisa la parte económica. Acompañaba a su padre en los viajes de trabajo y de promoción hasta que apareció Esther Doña. Xandra se quitó de enmedio, continuó con el día a día en las bodegas, pero ya no era lo mismo. En Navidades rompió el vínculo laboral con su padre que inició en 2003 y con el que mantiene una excelente complicidad, como explica a Vanitatis.
“Mi padre es una persona excepcional. Nos queremos mucho y por supuesto que estoy y voy a estar siempre con él. Igual que mis hermanos. Sigo siendo accionista, pero he querido iniciar mis propios proyectos individuales. Tienen que ver con el mundo de la gastronomía, que es el sector que conozco. Por ahora no puedo decir más porque estoy en plena organización”. Xandra estudió marketing, dirección y administración de empresas en las mejores universidades de Madrid, Oxford y París.
Al preguntarle si ese 'abandono' empresarial, que no afectivo, tiene que ver con terceras personas como puede ser la presencia de Esther Doña en la vida del marqués de Griñón, prefiere ser cauta: “Procuro no hablar de temas personales y menos ajenos. Lo único que puedo decir es que adoro a mi padre, que nos llevamos muy bien y que cada uno tenemos nuestra vida”.
Respecto a la participación de su hermana Tamara como cocinera de 'MasterChef' es más explícita: “Estoy deseando ver cómo lo hace. Es estupenda y muy alegre”.
A diferencia de otros hijos de famosos, Xandra Falcó y sus hermanos no han hecho del apellido paterno una forma de vida. La más mediática ha sido Tamara, pero en su caso por la vertiente materna (Preysler). Ninguno ha querido entrar en el desagradable desencuentro que protagonizaron el marqués de Griñón y su mujer, Esther Doña, en un hotel de Madrid en febrero pasado. Una discusión que acabó con el aristócrata en la comisaría y sin denuncia ratificada por parte de su consorte.
- Sentamos a Ágatha, Paloma Segrelles y Xandra Falcó a nuestra mesa de Navidad Paloma Barrientos Olga Moreno / Helena García