Fotos exclusivas: Aznar y Botella, comida en familia en uno de los restaurantes de moda de Madrid

José María Aznar y Ana Botella son un matrimonio de lo más familiar. Rara es la ocasión en la que no aprovechan para compartir ratos de ocio con sus tres hijos, José María, Ana y Alonso, tanto en Marbella, donde se refugian cada vez que pueden, como en Madrid, donde este jueves han sido fotografiados disfrutando de un agradable almuerzo en uno de los restaurantes de moda de la capital.

Acompañado por sus escoltas, el que fuera presidente del Gobierno llegaba el primero a la mesa reservada en Ultramarinos Quintín (de los mismos dueños que El Paraguas y Ten Con Ten), ubicado en el cruce de Jorge Juan con Lagasca, en pleno corazón del barrio de Salamanca.

Apenas unos minutos después, sobre las 14:30 h, llegaban su hijo José María, el primogénito del matrimonio, y su mujer, Mónica Abascal Ruano, que hicieron un hueco en sus agendas laborales para escaparse a disfrutar de las delicias de la carta de este restaurante en familia. De hecho, Mónica llegó con el portátil en la mano.

La última en llegar era la matriarca del clan, Ana Botella, que con un vistoso abrigo rojo con pañuelo a juego no pasó desapercibida al entrar en el local. La mesa tampoco tenía pérdida. Según nos relatan fuentes presenciales, se veía desde la calle ya que estaba ubicada al lado de uno de los grandes ventanales del restaurante.

Allí, sin duda degustaron algunas de las estrellas de la carta, entre las que destacan la lasaña de puerros y alcachofas, la pizza de pitu caleya, la ensalada de quinoa de Perú y, por supuesto, la fabada Quintín. Compartieron mesa, mantel y confidencias durante algo más de dos horas, y a la salida, los cuatro se despidieron escalonadamente a lo largo de otra media hora más.

El fundador de FAES fue el primero en llegar y también en marcharse. Acompañado de sus escoltas, que durante la comida le esperaron en el exterior del local, fue el primero en despedirse de su mujer, su hijo y su nuera. Rápidamente se subió a su coche en dirección a algún compromiso de su agenda.

En cuanto a José María y Mónica, amablemente acompañaron a Ana hasta su destino en la calle Serrano. Bajaron por Jorge Juan charlando animadamente. Sobre todo la exalcaldesa de Madrid y la esposa de su hijo, mientras que este caminaba algunos metros por delante con cierta prisa.

La relación entre ambas es fantástica desde siempre. Mónica es hija de Paloma Ruano Vega, una de las mejores amigas de Ana Botella, y su relación con su hijo mayor se retrotrae a hace varias décadas. Amigos desde niños, el pasado 17 de diciembre cumplieron 10 años de casados.

Una vez en la Milla de Oro de la capital, Botella aprovechó para hacer unas compras mientras que su hijo y nuera emprendieron un camino diferente, quizá a su domicilio en El Viso donde residen con sus tres hijos, Valvanuz, José María y Gaspar, que no fueron a la comida al ser entre semana y en horario escolar.