Carlos Herrera y Pepa Gea, juntos y enamorados en la Semana Santa sevillana

Verdaderamente, la vida de Carlos Herrera no ha experimentado grandes cambios después de volver a contraer matrimonio con la periodista Pepa Gea el pasado mes de diciembre. Han pasado cuatro meses de su boda secreta, que pudimos confirmar a través de una imagen compartida por el locutor de “todos ustedes, Herrera, Carlos” (su peculiar saludo radiofónico) a través de sus redes sociales el 31 de enero. Desde entonces, la pareja se ha dejado ver en público en contadas ocasiones, aunque sus vidas respectivas no han experimentado grandes cambios.

Ya lo dijo Carlos a Vanitatis cuando pudimos felicitarle y hablar con él en Sevilla a principios de febrero: “No va a cambiar nada”. Y así ha sido. Él continúa viviendo en Sevilla y desplazándose con frecuencia a Madrid o a los lugares desde donde se hace su programa de radio en COPE, y Pepa reside en la capital y continúa al frente del magacín 'Más de uno Madrid' en Onda Cero, y en ningún momento se ha planteado dejar su trabajo ni renunciar a la radio.

Un amigo común nos cuenta que precisamente ese es el éxito de la relación de ambos: “Pepa siempre ha sido una mujer muy independiente, se conocen mucho y muy bien. Son amigos desde hace muchos años, pero cuando su relación comenzó a ser de pareja, ella jamás se planteó la opción de dejar de trabajar. Es más, cuando alguien cercano le pregunta si va a seguir trabajando, se rebela y recuerda que lleva muchos años haciéndolo y que no piensa renunciar a algo que le apasiona, ni a la experiencia de tantos años en la radio, donde es muy querida y respetada por sus compañeros”.

Precisamente, su esfuerzo laboral era reconocido recientemente a través de un premio de la Comunidad de Madrid el 8 de Marzo, Día de la Mujer. Pepa, junto a seis mujeres más, recibía el reconocimiento de la comunidad autónoma por ser “referente e inspiración para toda la sociedad por su talento y liderazgo, además de sus logros y trayectoria profesional”. Ella recibía la distinción en la categoría de comunicación y se premiaba “su dilatada experiencia en múltiples medios, su compromiso, rigor y actividad docente”.

En esa ocasión dedicaba el premio a sus hijas, Sofía y Paula, dos jóvenes con las que tiene una fantástica relación, que también suelen visitar Sevilla y a las que Carlos tiene un gran cariño. Curiosamente también Sofía se dedica a los medios de comunicación y ha trabajado a las órdenes de Carlos Herrera, igual que Alberto, el hijo de Carlos, que tiene hasta ahora una corta pero brillante carrera radiofónica. En la cadena COPE sustituye a su padre; comenzó con una pequeña sección musical, 'Yo te lo explico papá', pero poco a poco ha ido ganándose su sitio. En verano ya demostró su capacidad sustituyendo al líder de las mañanas, y en esta Semana Santa también se puso al frente del programa el pasado Viernes de Dolores, protagonizando una simpática anécdota, al ser el santo de su madre, Mariló Montero, felicitándola en directo.

El equipo de Herrera ha acogido a Alberto con mucho cariño, pero también con un gran nivel de exigencia. Cuenta uno de ellos a Vanitatis que cuando Alberto empezó a trabajar en COPE, por deseo de su padre, fue comiendo uno a uno con todos ellos para que le expusieran su opinión y le indicaran que era lo que veían bien y qué debía corregir, siendo una gran lección de humildad para el joven, que siempre ha sentido la pasión por la radio, aunque también se ha dedicado al mundo de la empresa y el deporte, gestionando parte del patrimonio familiar.

La relación de Pepa con los hijos de Carlos es también cordial y exquisita, con Alberto comparte la pasión de la comunicación, y Rocío tiene una edad similar a la de sus hijas. Pepa es consciente también del vínculo tan especial que el periodista mantiene con sus hijos, por eso respeta mucho los espacios y momentos que Carlos comparte con ellos. Por ejemplo, el Domingo de Ramos, Herrera lo comenzó en compañía de su hijo Alberto. Luciendo los dos el traje de chaqueta y corbata que forma parte de la estética de un día muy importante en la ciudad, visitaron distintos templos desde primera hora de la mañana. Carlos además fue pregonero de la Semana Santa de Sevilla en el año 2001, un pregón que 22 años después se sigue recordando y que ha dejado algunas frases célebres que forman parte del lenguaje coloquial como la de “¡A la Gloria, sevillanos!”.

Pepa ha conseguido integrarse totalmente en la cultura andaluza; a pesar de ser alicantina, no falta ningún Domingo de Ramos en Sevilla. Este año se vistió de un color vivo anunciando la primavera, el azul, tampoco se pierde la Feria de Abril, en la que Carlos comparte caseta con su buena amiga Ana Rosa Quintana, que curiosamente también se ha comprado una casa en Sevilla (junto a la de Carlos), y por si fuera poco, Pepa además se ha hecho rociera.

La aldea de El Rocío es un lugar muy especial para la familia Herrera; suelen pasar siempre allí las navidades y la visitan con frecuencia a lo largo del año. Comparte también la pasión por otro lugar muy especial para Carlos, Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), donde tiene su paraíso particular frente al Coto de Doñana y donde celebra todos los años el final de la temporada radiofónica, que coincide con su fecha de cumpleaños, el 8 de julio. Este año además cumple 66, pero Herrera no piensa en la retirada radiofónica puesto que los índices de audiencia y su buen estado de salud lo avalan.