La pareja, muy discreta, cuyo primer beso en público pudimos ver el pasado mes de abril, compartió este momento tan especial, así como la fiesta preboda, con la hija mayor de Paloma Cuevas, Paloma, que como pudimos ver ha heredado tanto el gusto como el estilo de su madre.
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Paloma Cuevas, espectacular con un vaporoso vestido con capa y escote en pico en azul aguamarina de Rosa Clará, deslumbró a su llegada a la ceremonia, y posó, como se puede ver en el vídeo que publicó en su cuenta de Instagram, junto a la diseñadora, que vestía de rosa buganvilla, uno de los tonos estrella de la temporada.
La boda de Daniel Clará en París ha sido, al parecer, la antesala de las vacaciones de Luis Miguel y Paloma Cuevas, que pasarán unos días en la capital francesa antes de poner rumbo a la costa italiana, con Nápoles como primera parada. A pocos kilómetros de la ciudad se encuentra la Costiera Amalfitana, uno de los destinos más apetecibles del mar Mediterráneo, donde se embarcarían en un navío privado rumbo a Capri, para, presumiblemente, terminar su periplo en Palma de Mallorca.