Adiós a Silvia Tortosa, la niña emigrante que alzó la bandera de la libertad
La actriz presumía de haber nacido en una familia protectora y trabajadora y conectaba con el apoyo de varias generaciones por ser libre de pensamiento y de acciones
La actriz Silvia Tortosa ha fallecido a los 77 años en Barcelona. Su agencia de representación comunicaba la triste noticia a media mañana, aunque ya la noticia estaba en el aire.
El lunes se abrirá la capilla ardiente en el tanatorio de Les Corts hasta las dos de la tarde. Una vez que finalice la liturgia religiosa, la actriz y presentadora recibirá sepultura en el cementerio de Montjuic junto a sus padres, como ella misma dejó dicho.
Hace cinco años le diagnosticaron cáncer de mama. Quiso comunicar públicamente la noticia para que no surgieran las especulaciones. Lo hizo en el programa 'Sábado deluxe' y antes en su canal de YouTube, donde era muy activa y donde contaba con un abanico amplio de seguidores que sumaban más del millón.
Contaba sus experiencias vitales, anécdotas de su faceta profesional, de cómo las plataformas televisivas ofrecían más posibilidades a los actores y actrices y hasta descubría cómo había sido y era su vida amorosa.
Decía que estaba muy orgullosa de conectar con la gente más joven, que no sabían mucho de lo que eran las películas de la transición. No formó parte del grupo principal del 'destape' y con sentido del humor reconocía en las entrevistas que “lo mío fue de enseñar poquito, seguramente porque mi físico no era tan espectacular como el de las otras”. Se refería a las espectaculares Bárbara Rey, Susana Estrada o Nadiuska, que fueron las más representativas.
En un chequeo rutinario en el 2019 le dieron la mala noticia. “Cuando me lo dijeron se me cayó el mundo encima. Una vez que lo asumí, que fue en un tiempo récord, me puse manos a la obra, que era curarme. Lloré lo que tenía que llorar y retomé mi vida”, explicaba.
A los pocos días de su intervención, ya estaba grabando sus mensajes en YouTube y reconocía los momentos agridulces. “Estoy emocionalmente un poco baja, pero todos vuestros mensajes son la mejor medicina”.
Conectaba con varias generaciones precisamente por ser libre de pensamiento y de acciones. “La edad sirve para distanciarse de la intolerancia y la mala educación. He llegado a un punto de mi vida que lo que hago es desprenderme de las personas tóxicas”.
Nunca tuvo ningún problema para contar cuestiones que otros artistas no contaban y se encargaba de deshacer rumores que la afectaran.
Presumía de haber nacido en una familia protectora y trabajadora. “Mi padre era taxista y mi madre ama de casa. Nosotros éramos emigrantes, pero nunca sentí que mis padres estuvieran incómodos. Quizá el problema llegó muchos años después, cuando la integración no es el mejor pasaporte en Cataluña. El que me convirtiera en actriz no era el mejor futuro para mí, pero nunca se opusieron. Estaban muy orgullosos de mí”, explicaba en las entrevistas.
Estudió Artes en la Escuela Massana e Interpretación en el instituto del Teatro de Barcelona.
Sabía inglés y francés, tenía mundo y era una lectora empedernida que recomendaba a sus youtubers libros, obras de teatro, series interesantes y lugares para visitar. “Soy una especie de guía del ocio”. Y lo bueno era que sus opiniones eran celebradas.
En cuestión de amores decía que se había equivocado unas cuantas veces, pero “las experiencias negativas nos hacen más fuertes”. Con su primer marido no consumó y se separaron el tiempo que dura la hoja de un calendario. Llegó otro personaje que, al no darle buena vida, también le dijo “ahí te quedas”.
Algunos de sus amores no fueron correspondidos como a ella le hubiera gustado pero, como decía, “los errores o te hunden o te hacen fuerte”. Sí encontró el puerto seguro en el que atracar en Carlos Cánovas, que ha sido su pareja, su amigo, su confidente y su todo.
Era una de las fijas en las Cruces de Mayo que organizaba en Pastrana Paco Clavel y junto a otros amigos compartía cena, procesión y madrugadas. “Lo bonito en la vida es ser libre y yo lo soy”, repetía como una mantra que trasladaba a la gente que quería. Tuve la suerte de disfrutar de ese mensaje.
La actriz Silvia Tortosa ha fallecido a los 77 años en Barcelona. Su agencia de representación comunicaba la triste noticia a media mañana, aunque ya la noticia estaba en el aire.