Muere la madre de Adriana Abascal: la carta de despedida de la modelo

Adriana Abascal ha sufrido una de las pérdidas que, pese a formar parte de la ‘ley de vida’, es de las más dolorosas, la de su madre, que falleció este jueves 19 de junio de 2025. La modelo ha dado la noticia ella misma a través de su perfil de Instagram.

Lo hacía compartiendo una tierna fotografía de las dos, mirando a cámara, sentadas en el bordillo de una piscina. Junto a esta instantánea, Adriana también compartía un pequeño texto de despedida dedicándole a la mujer que le dio la vida unas palabras de cariño a ojos de sus más de 129 mil seguidores de Instagram.

“Mamá, hoy nos dejas, y yo te digo adiós”. Un recuerdo, dice la modelo, que permanecerá en todas aquellas personas a las que convirtió en lo que son hoy en día. “Seguirás viviendo en mí, en tus nietos, en todos los que amaste y que te amó”.

Describiendo además a su madre con unas bonitas palabras y una cualidades que solo conocían aquellos que habían tenido la suerte de conocerla. “Fuiste el alma más graciosa, divertida, elegante y mágica”. “Gracias por ser mi madre. Te llevaré conmigo y te honraré por siempre”, terminaba.

Una noticia muy triste que llega en un momento de auténtica felicidad para Adriana Abascal. La modelo se había convertido en noticia a comienzos de este 2025, cuando se descubrió que entre ella y Filiberto de Saboya había algo más que una simple amistad. Arrumacos y cariños durante un desfile de moda flamenca en Sevilla publicados por ‘LOC’ fueron la primera prueba.

Esto hizo que, dos meses más tarde, Filiberto anunciase oficialmente su divorcio con Clotilde Courau, su mujer desde 2004 y madre de sus dos hijas, Vittoria y Luisa. Esta confirmación daba por fin vía libre al príncipe y la modelo a aparecer públicamente en diferentes actos. Y así lo hicieron.

No fue hasta el pasado mes de mayo que, por fin, el propio FIliberto habló públicamente de su relación con Adriana Abascal desvelando detalles como que no vivían juntos. “Cada uno vive por su cuenta, trabajamos mucho. Adriana y yo nos llevamos muy bien. Nos alegra mucho volver a encontrarnos, ya sea en Mónaco, Italia, España o París. Quizás esta pequeña separación mantiene viva la llama de los sentimientos”.

Ahora, Filiberto vivirá un momento crucial en cualquier relación, acompañar a su pareja en un momento tan doloroso y triste como es la pérdida de una madre, su suegra.