Famosas cegadas por el bisturí

Los españoles somos adictos a la cirugía estética. Buscamos mejorar nuestro aspecto físico en quirófano más que ningún otro europeo. Dicen los expertos que es porque nuestro proceso de envejecimiento es el más rápido de toda Europa por culpa del sol. El problema de estas operaciones es que crean adicción. ¡Que se lo digan a nuestras famosas! Cuando se vence el miedo de la primera vez y el resultado es el esperado, las pacientes inician la carrera y hay veces en que hay que frenarlas. Si la frase está en femenino es porque nueve de cada diez ‘valientes’ son mujeres.

En el siglo XX sólo acudían al cirujano plástico las aspirantes a actriz como la mítica Marilyn Monroe, que acható su nariz para resultar fotogénica. Folclóricas como Lola Flores o Paquita Rico tampoco dudaron en hacerse un lifting para eliminar las arrugas y la flacidez de su rostro y cuello. Era su gran secreto, junto con su fecha de nacimiento. Ahora, en el siglo XXI es difícil encontrar a alguien que no haya pasado por el quirófano... aunque guarden el secreto bajo cientos de llaves. Loles León, Rosa María Sardá, Isabel Preysler, Ana Obregón, Belén Esteban o Maria José Campanario son sólo algunos ejemplos de ello.

Miedo al paso de los años

Para recuperar la figura están las dietas, el gimnasio, los tratamientos de mesoterapia, vasculoterapia... o la varita mágica de un cirujano. María José Campanario, Chenoa, Melanie Griffith, Britney Spears o Liv Tyler, después de dar a luz, han remodelado su figura bajo los efectos de la anestesia.

Pasados los años dorados del Wonder Bra, el aumento de pecho a la carta está en voga: bien lo saben Ana Obregón, Belén Rueda, su tocaya Esteban, Pamela Anderson, Demi Moore, Victoria Beckham, Christina Aguilera, Britney Spears y Gwyneth Paltrow. La actriz Drew Barrymore redujo su talla pectoral y aprovechó la operación para luchar contra la ley de la gravedad, al igual que Jessica Simpson, que tras verse flácida ante el espejo tras la ‘milagrosa’ dieta de Atkins, pasó la tarjeta de crédito por una clínica en la que le devolvieron sus turgentes pechos.

Siguiendo la línea de los estiramientos, pero aplicados en la cara, Magdalena Álvarez, Nicole Kidman y Sofía Loren sucumbieron a la moda de luchar contra el tiempo, al igual que Sarkozy, que gracias a un lifting, luce una piel tan tersa como la de su mujer. El presidente francés, adicto a los tratamientos de belleza, también se hizo implantes capilares, y no es el único que ha repetido ‘visita al médico’: Elsa Pataky, muy diferente a como la conocimos en la serie adolescente que protagonizó hace años, se ha operado la nariz, como Jennifer Aniston, Ashlee Simpson, Cameron Díaz, Salma Hayek, Sandra Bullock, Angelina Jolie y Paris Hilton, y ha rellenado sus pómulos, retocado los labios, al igual que Esther Cañadas, y afilado los rasgos para tener un rostro más delgado, siguiendo el más puro ejemplo de Cher.

La cirugía avanza a pasos agigantados y quizá dentro de 20 años nuestras famosas sigan estando como hoy... Dice Antonio Banderas que “Envejecer es parte de la vida. ¿Para qué manipular la naturaleza?”. Una pregunta que sólo ellas pueden responder...