¿Por qué ha cambiado de ‘look’ la Princesa de Asturias?

Ser Princesa de Asturias no resulta fácil. Y si no que se lo pregunten a Letizia Ortiz, que ha tenido que aprender sobre la marcha un cargo para el que no estaba destinada. Hace unos meses le llovían las críticas por sus vestidos, sobre todo, por su repetitivo estilo clásico. Pero ahora las cosas han cambiado. Unos cuantos vestidos bien elegidos, nuevos diseñadores y el consejo de varios asesores han cambiado las tornas. Ahora, sus elecciones son alabadas tanto por la prensa nacional como internacional.

Desde que en la pedida de mano debutó con un Armani, el look de la princesa no ha parado de cambiar. Aconsejada por la Reina Sofía, una de sus aliadas, Letizia buscó un diseñador de referencia que le elaborara su fondo de armario. Para su puesta de largo internacional se agenció dos trajes de Lorenzo Caprile, aunque pronto se puso en manos de Felipe Varela que, estación tras estación, ha llenado su armario de trajes, aunque los resultados no han sido satisfactorios para muchos. En algunos casos, la sosería ha sido la nota dominante.

Pero en los últimos meses las cosas han cambiado. La Princesa de Asturias ha ampliado la paleta cromática de sus trajes, así como las formas de los mismos. Además, ha introducido nuevos diseñadores. ¿La razón? Buenos consejos. Y es Letizia nunca se había interesado por la moda, algo accesorio para ella. Pero algunas de sus amistades le han abierto los ojos y parece que ella ha comprendido que se tiene que preocupar más por su look. Como persona perfeccionista, ha aprendido bien la lección.

Su última incorporación ha sido un vestido negro, corto, modelo babydoll y veraniego que causó sensación en su primera aparición pública en Mallorca, en la entrega de premios de una de las regatas. En este caso, no se trata de un Felipe Varela, sino de uno de Armand Bassi diseñado para la marca por Markus Lupfer. Y esto lo acompañó con unas sandalias de tacón imposible, muy en la línea con los que habitualmente lleva Gwyneth Paltrow, a la que curiosamente se relacionó con don Felipe. Según parece, podría haber más sorpresas este verano con vestidos de otras marcas españolas.

Durante la primavera, Letizia ya había comenzado a introducir cambios. Para varios actos se colocó faldas al alcance de cualquier bolsillo. Luego llegaron los trajes ajustados para resaltar su estilizada silueta. Así, optó por un traje verde y uno naranja, dos trajes cortados prácticamente por el mismo patrón con el que parecía ir de uniforme. Sin embargo, para muchos fue un aire fresco. De hecho, la edición norteamericana de la revista Vogue incluyó uno de estos en su estilismo del día. Como imagen pública, la ropa que lleva siempre será motivo de debate.