Retrasan la operación de la duquesa por las aspirinas

Todo estaba previsto para que el viernes el doctor Trujillo interviniera quirúrgicamente a la duquesa de Alba. La operación consistía “en la colocación de una válvula para derivar el líquido cefalorraquídeo y, de ese modo, aliviar la presión en los ventrículos cerebrales”, según explicación del neurocirujano sevillano. Con esta medida, la calidad de vida de Cayetana iba a mejorar, así como su movilidad, que cada vez estaba más atrofiada.

La operación no suponía ningún riego vital. Desde el primer momento. la duquesa -al igual que los hijos- había recibido puntual información de su médico de cabecera. Aunque estaba al tanto de todo y la última decisión siempre la ha tomado ella, estos días pasados su estado emocional era regular. Mantenía conversación telefónica diaria con su novio, pero parece que no era bastante. Por eso, el jueves (Ver noticia), Alfonso Díez tomó el AVE con destino a Sevilla y pasó la tarde con ella para animarla. Lo que nadie se esperaba es que por la noche, cuando el doctor Trujillo visitó a su paciente, decidiera retrasar la operación.

Las pruebas y análisis previos que la había realizado se hallaban perfectas, salvo un marcador que no estaba demasiado alterado, pero sí lo suficiente como para que el especialista la informara que era mejor esperar. Este marcador era el referente al tiempo de coagulación de la sangre.

La cuestión era saber cuál era la causa que producía esa variación. Y como ocurre a veces, la solución era de lo más sencilla. Como otras personas mayores, la duquesa toma desde hace años y diariamente una aspirina. Una medicación totalmente contraindicada para cualquier paciente que vaya a someterse a una intervención. Por lo tanto, se decidido retrasar la operación algo más de una semana hasta que los análisis estén totalmente correctos.