Esther Koplowitz y su marido, juntos en Barcelona

La discreción es el santo y seña de todo lo que rodea la vida de la empresaria Esther Koplowitz y su familia. No frecuenta los ambientes sociales que refleja la prensa del colorín y su vida pública se limita a los actos meramente profesionales y a los solidarios. Estos últimos, relacionados con la fundación que lleva su nombre, que se dedica al desarrollo de proyectos para los más necesitados y la investigación médica.

Dentro de su actividad extraprivada se puede contar también su participación en encuentros empresariales y su presencia en actos de carácter cultural. Hasta ahí llega el alcance mediático. Ni tan siquiera su segunda boda con Fernando Falcó, marqués de Cubas, tuvo repercusión en los medios de comunicación. Para no distorsionar la noticia, ella misma distribuyó un par de fotos a revistas y periódicos tras conocerse la noticia.

Esther Koplowitz, principal accionista y vicepresidenta de FCC, ha sufrido en propia carne lo que significa que su vida privada sea motivo de comentario. Por eso, ahora que el rumor de las supuestas desavenencias conyugales ha sido noticia en el programa de Tele 5 ‘¡Salvame!’, fuentes autorizadas han relatado a Vanitatis que no hay novedad en la vida personal de Esther Koplowitz. Ayer hubo junta de accionistas en Barcelona y la empresaria acudió con su marido a la reunión, donde volvieron a reeligirlo por otro periodo de cinco años como consejero.

Lógicamente, si la relación marital no funcionara, siempre habría existido una excusa para la no ratificación. Por tanto, tal y como explican a Vanitatis, no hay, a día de hoy, sombras en la relación. Viajaron juntos a Barcelona y volvieron a Madrid también juntos.