De José Bono a Marta Sánchez: las rupturas más sonadas de 2010

Nada más comenzar el año ya habían parejas de famosos cuya relación sentimental se encontraba en la cuerda floja. Poco les duró el encanto a Mónica Hoyos y Cayetano Martínez de Irujo que, pese a disfrutar de unas románticas vacaciones en Kenia, les pudo la presión mediática y decidieron dar paso a una “simple amistad”.

Tamara Falcó y Luis Medina hicieron lo propio. Eran toda una pareja de manual, pero, finalmente, su historia no llegó a cuajar, al igual que la de Fonsi Nieto y Carmen Jordá. Toda una pena para Naty Abascal e Isabel Preysler que ya habían pensado qué tocado llevar para semejante bodorrio. El punto y final al amor entre los top Almudena Fernández y Cameron también llegó en enero.

Semanas más tarde, el cantante Carlos Baute anunciaba el fin de su longevo noviazgo con la estilista Beatriz Mira, directora de comunicación de Alma Aguilar. Allende los mares, la ruptura más escandalosa saltó cuando días más tarde de que recogiera su premio Oscar a la mejor actriz, Sandra Bullock se enfrentaba a uno de los trances más duros de su vida: se separaba de su marido, que la había engañado públicamente. Jesse James tuvo que reconocer las infidelidades en un programa de máxima audiencia. Para entonces, Inés Sastre y su novio francés, Jean Luc Delarue, tampoco compartían confidencias.

Una de las parejas más consolidadas del panorama social patrio, la formada por el torero Espartaco y Patricia Rato, decidía finalizar su matrimonio, ya que no habían sido capaces de superar los escollos de 19 años de afecto, cariño y roce. El divorcio, en el que ha resultado ganadora la ex mujer del torero, ha ilustrado páginas y páginas del colorín.

Al igual que la hipotética relación que Rato mantendría con el torero Francisco Rivera, que por las mismas fechas daba carpetazo a su relación con la bailarina Cecilia Gómez. Meses más tarde, un esporádico encuentro con Rebeca sirvió para que la cantante le dedicase una canción e incluso iniciase gira promocional ‘con motivo de’.

En el Reino Unido, Cheryl Cole y Ashley protagonizaban la ruptura más sonada del año. Formaban una pareja diez, pero las infidelidades del jugador dieron al traste con todo. Breve fue la relación que se le adjudicó a Cristina Valls Taberner con el dueño de Mango, Isak Andic. Al igual que corto fue también el período de tiempo que le costó a la actriz Kate Winslet en rehacer su vida tras su divorcio de Sam Mendes con el modelo Louis Dowler, con el que tampoco sale ya.

Pero, si alguien pensó que las familias reales europeas pueden renegar de estos golpes del corazón, Magdalena de Suecia es la excepción que confirma la regla. Con el anuncio oficial en las portadas de los principales periódicos del mundo, la hermana de la heredera sueca tuvo que refugiarse en Nueva York para escapar del revuelo mediático que se organizó en el país escandinavo al conocer el engaño al que la había sometido su ex, el abogado Jonas Bergstrom.

Chenoa lo dejó con David de María; María José Suárez con Feliciano López, meses antes de la pérdida del bebé que esperaban, Carlos Larrañaga con Ana Escribano y Ariadne Artiles con Dani Homedes, representante de Fernando Verdasco.

La noticia bomba llegó a principios de verano cuando el presidente del Congreso, José Bono, decidía separarse de Ana Rodríguez, quien había sido su mujer durante los últimos 29 años. Pero quien fuera presidente de Castilla La Mancha no es el único político que este año ha tenido que enfrentarse a un doloroso desamor. La ministra de Cultura Ángeles González Sinde se separaba hace unos meses del padre de su segunda hija, el ayudante de dirección Javier Gil del Álamo.

 

Marta Sánchez y su marido, el publicista Jesús Cabanas, se convertían en las estrellas rutilantes del culebrón del verano. La cantante anunciaba un tiempo de reflexión, y acto seguido los fotógrafos ya se encontraban apostados a las puertas de su casa. La ex solista de Olé Olé pronto encontró otro hombre: un apuesto caballero, llamado Hugo Castejón. Su ex, en cambio, tardó un poco más, pero lió una de las historias anexas más polémicas de este año.

Cabanas comenzó a salir con Eva Zaldívar, ex de Pepe Navarro, que dejó a su por entonces novio, el cantante Juan Peña, dicen que sin previo aviso, lo que le ocasionó un fuerte impacto emocional. Tras el batacazo que sufrió, el artista tiene una nueva ilusión, que no es la sobrina del Rey con quien una noche se le vio en actitud cariñosa.

El noviazgo entre el futbolista Guti y la modelo Noelia López tampoco pudo finalmente ser, al igual que tantos años de unión matrimonial entre Rafa Camino y su mujer Natalia Álvarez, que han logrado salvar sus diferencias. Marta Torné está soltera oficialmente desde que hace unas semanas trascendiese que su noviazgo con el prestigioso fotógrafo Jaume de Laiguana ya es pasto del pasado.

Lewis Hamilton y su novia, la cantante Nicole Scherzinger, lo dejaron y han vuelto, al igual que Belén Esteban y su marido Fran, que se han separado tantas veces como los disgustos que Hannah Montana le da a sus padres, que también se acaban de divorciar.

Fuera de nuestras fronteras, el desamor ha causado estragos. Ya no son una realidad: Christina Aguilera y Jordan Bartman, Halle Berry y Gabriel Aubry, Madonna y Jesús Luz, Mel Gibson y Oksana Gregorieva…. Además, César Millán, Leona Lewis, James Blunt y Elisabeth Hurley también han decidido rescindir su contrato de amor vitalicio. Los últimos en hacerlo público han sido las parejas formadas por Zac Efron y Vanessa Hudgens y Scarlett Johansson y Ryan Reynolds.

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