Alimentos que te ayudan a fijar el calcio en los huesos

Unos huesos fuertes son el sueño de cualquiera, nos dan soporte y nos permiten movernos, además protegen nuestros órganos. Por eso es tan importante pensar en ellos de vez en cuando, tener claro qué podemos hacer para protegerlos y para conseguir que se mantengan saludables el mayor tiempo posible.

Entre las muchas cosas que podemos hacer para cuidar nuestros huesos, hay algunas que son más sencillas de conseguir que otras. Por ejemplo, el ejercicio físico es importante, mantenernos activas y fuertes, pero también tener hábitos saludables, como evitar el exceso de alcohol y tabaco. La alimentación es otro pilar fundamental, una dieta adecuada puede suponer un gran cambio.

La salud de nuestros huesos no parece una gran preocupación en la juventud, donde casi nada parece preocupante, pero a medida que cumplimos años esto se va haciendo más evidente, sobre todo en el caso de las mujeres.

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Por ejemplo, los cambios hormonales que se producen durante la menopausia hacen que estos se debiliten, pero no es el único momento en el que esto sucede. Durante el embarazo, parte del calcio que forma los huesos se destina al bebé que se está formando, aunque en este caso se recupera con el tiempo.

Cómo fijar el calcio en los huesos

La vitamina D es clave para fijar el calcio en los huesos, por eso, además de hacer algunos cambios en nuestra alimentación, es muy recomendable pasar tiempo al aire libre. Como señalábamos antes, el ejercicio físico también ayuda, por lo que caminar unos minutos al día dejando que nos dé el sol puede ser una estupenda manera de ayudarnos a fijar ese calcio en los huesos. Eso sí, siempre con protector solar y evitando las horas de mayor exposición.

Ejercicio y alimentación son dos pilares esenciales para una vida sana y por eso hacer algunos cambios en nuestra dieta puede ser una buena idea. Incluir alimentos ricos en vitamina D, como pescados azules (salmón, atún o sardinas), huevo y marisco, como gambas y langostinos.

La vitamina K ayuda al cuerpo a formar los huesos y la encontramos en verduras como el brócoli, que además es muy rico en calcio, y frutas como los arándanos, frambuesas y peras. Por extraño que parezca, también la encontramos en los pepinillos encurtidos, que siempre es mejor seleccionar bajos en sal.

Alimentos que lo impiden

Tan importante como saber qué alimentos favorecen la absorción del calcio es saber cuáles pueden bloquearla, alimentos que no conviene consumir a la vez que aquellos que son fuente de calcio, como los lácteos. Por ejemplo, el chocolate es rico en taninos, que puede unirse al calcio evitando su absorción. Tampoco es recomendable excederse con la cafeína, aunque parece ser que esto afecta más en el caso de los hombres.

La sal favorece la eliminación del calcio y el azúcar disminuye su absorción intestinal, además de bloquear la activación de la vitamina D. Alimentos ricos en oxalatos como las verduras de hoja verde, las fresas o la remolacha, también los que contienen ácido fítico como los cereales.

Evidentemente, esto no quiere decir que nuestra dieta tenga que estar formada solo por los alimentos que favorecen la absorción del calcio, eliminando el resto, sino que pone de manifiesto la importancia que una dieta equilibrada tiene en nuestras vidas, también a largo plazo. En cualquier caso, la opinión de un médico o un especialista en la materia será la mejor forma de asegurarnos de que nuestros huesos están en plena forma.