Los mejores alimentos para comer por la noche y seguir adelgazando
Las cenas también son importantes, sobre todo si quieres perder peso
Cuidar lo que comemos es indispensable para conseguir llevar una vida más sana y equilibrada. Sin embargo, cuando llega el final del día a menudo estamos cansados y, para la hora de la cena, optamos por aquello que nos resulta más cómodo y no siempre eso significa que sea lo mejor para nosotros. Por eso, una buena planificación es fundamental para conseguir cambiar nuestros hábitos menos saludables.
El primer consejo que os podemos dar es, por tanto, que si desde el momento en el que vamos a la compra lo hacemos teniendo en mente qué vamos a comer y qué cenaremos, será siempre más sencillo cumplir con nuestros objetivos.
Para empezar, es importante no renunciar a la cena, saltarse una de las cinco comidas que deberíamos hacer al día nunca es buena idea. En lugar de ayudarnos a adelgazar, como solemos pensar, puede provocar todo lo contrario.
Lo adecuado para la hora de la cena es preparar una comida ligera, tomárnosla temprano y hacerlo de forma consciente, dedicándole nuestra atención sin dejar que el móvil o la televisión nos distraigan.
Si comer despacio te cuesta un poco, uno de los trucos más sencillos para conseguirlo es hacer porciones pequeñas y, cada vez que te lleves una a la boca, dejar el tenedor sobre la mesa hasta que hayas terminado de masticar.
Alimentos para la cena
Después de cenar solemos irnos a la cama, por eso durante la cena debemos apostar por alimentos saludables y que nos ayuden a tener una placentera noche de sueño reparador. Dormir toda la noche puede ayudarnos a quemar más grasa.
Por ello no es mala idea tomar alimentos ricos en triptófano, porque pueden ayudarnos a generar melatonina, la hormona que promueve el descanso. Este es el caso del yogur, la leche, los plátanos o los frutos secos, pero con moderación para no excedernos en las calorías.
Durante la hora de la cena es conveniente que esta esté formada por verduras y proteínas. Para estas últimas siempre será mejor no recurrir a las carnes rojas, de las que se recomienda un consumo moderado.
Por ello, será mejor obtenerlas de alimentos como las legumbres, el pescado azul o las carnes magras. Por ello se suele recomendar para la cena tomar pechuga de pollo a la plancha o pescado al vapor, como el salmón, al atún o la sardina. También se pueden obtener de los huevos.
La forma en la que lo preparamos es relevante, porque conviene evitar los fritos y las salsas, que a menudo hacen la cena más pesada. Será mejor optar por cocinar al vapor, a la plancha o al horno.
Las verduras son estupendas en cualquier ocasión, durante la cena también porque además de no aportar muchas calorías, tienen muy pocas grasas. Siempre se recomienda evitar las que puedan provocar digestiones poco fluidas por su alto contenido en fibra.
En el caso de las ensaladas, se desaconseja el uso de lechuga durante la cena porque puede resultar indigesta. Si es tu caso, prueba a cambiarla por tomate o por espinacas o rúcula, muy rica en vitamina C y betacarotenos.
Por supuesto, antes de modificar tus hábitos de alimentación, lo mejor es consultar con un experto nutricionista que te ayude y solucione todas las dudas que te puedan surgir.
Cuidar lo que comemos es indispensable para conseguir llevar una vida más sana y equilibrada. Sin embargo, cuando llega el final del día a menudo estamos cansados y, para la hora de la cena, optamos por aquello que nos resulta más cómodo y no siempre eso significa que sea lo mejor para nosotros. Por eso, una buena planificación es fundamental para conseguir cambiar nuestros hábitos menos saludables.