Robert Waldinger, el psiquiatra que te ayuda a desbloquear el secreto de la felicidad

¿Qué es la felicidad? Aunque la pregunta parece simple, la respuesta continúa siendo un misterio. Para muchos, alcanzar la felicidad es el objetivo principal de este viaje que llamamos vida. Sin embargo, si les preguntas, es probable que cada persona te dé una respuesta diferente, aunque la mayoría podría estar de acuerdo en que la felicidad se asocia con sentimientos y emociones de bienestar y plenitud.

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En el contexto actual, donde el coste de vida es cada vez mayor y el aislamiento social se intensifica, puede ser más fácil sentirse triste y desconectado. Pero, ¿y si alcanzar la felicidad fuera más sencillo de lo que imaginamos? ¿Y si realmente estuviera más cerca de nosotros de lo que pensamos? Robert Waldinger parece haber dado con la clave.

Este psiquiatra y profesor de Harvard, actualmente dirige el Estudio sobre Desarrollo Adulto, una de las investigaciones más extensas sobre la felicidad que ha durado 85 años y ha seguido la vida de 700 personas. Durante el análisis se ha explorado cómo evolucionan la salud, decisiones, relaciones sociales y satisfacción personal de los individuos a lo largo de su vida.

El pilar más importante para ser feliz

En contra de lo que se piensa, ser felices no radica en un mayor éxito financiero o un mejor status laboral. La verdadera felicidad está en las conexiones sociales que establecemos. Se ha demostrado que mantener relaciones sólidas contribuye a un envejecimiento más saludable, de hecho hay una correlación clara entre mantener buenas relaciones y disfrutar de una mejor salud.

“Las relaciones no son sólo esenciales como trampolines hacia otras cosas, ni son simplemente una ruta funcional hacia la salud y la felicidad. Son fines en sí mismos”, es una de las frases que comparte en sus redes sociales.

No tenemos una fecha tope para hacerlo porque nunca es tarde para hacer nuevos amigos. Debemos dejar de lado el concepto cerrado de amistad, no hace falta que sean amigos fieles, basta con que sean relaciones sanas que nos aporten el bienestar necesario para sentirnos felices.

Cómo llegar a esa felicidad

Para el Dr. Waldinger la felicidad radica en la simplicidad y en nuestra capacidad de integrarnos y conectarnos con la sociedad. A través de su investigación y experiencia personal, sugiere que la felicidad se construye en las interacciones diarias y en aceptar nuestra vida tal como es.

Uno de los primeros pasos para abrazar esta vida sencilla es dejar de juzgarnos tan severamente. A menudo, en nuestra búsqueda del éxito, nos convertimos en críticos implacables de nuestras propias acciones. Nos castigamos por cada error y nos colocamos expectativas poco realistas, lo que solo genera frustración y descontento. La aceptación es esencial para aliviar la presión que nos imponemos y para empezar a vivir de manera más plena y serena.

Otro aspecto importante es dejar de idealizar a los demás. Admirar a las personas está bien, pero es esencial reconocer que nadie es perfecto y que todos, incluso aquellos que consideramos extraordinarios, enfrentan desafíos y adversidades. Ellos también experimentan dudas y tristezas, igual que cualquier otra persona. Recordar que compartimos una humanidad común puede ser un gran consuelo y nos ayuda a sentirnos menos solos en nuestros propios viajes.

Finalmente, aprender a disfrutar de las cosas simples de la vida puede enriquecer enormemente nuestra existencia. A menudo pasamos por alto las maravillas del día a día, como un día soleado, la música que nos emociona o la belleza de una flor, porque nos parecen comunes. Sin embargo, si nos detenemos a apreciar estos detalles, podemos descubrir una fuente constante de alegría y satisfacción.

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Waldinger concluye que el bienestar no es un objetivo distante, sino una parte integral de nuestras vidas cotidianas que podemos experimentar en cualquier momento si solo aprendemos a reconocerla. Adoptar estos enfoques puede no solo simplificar nuestra vida, sino también llenarla de un profundo sentido de satisfacción y propósito, guiándonos hacia la verdadera felicidad.