La 'paga' menguante de la infanta Elena

La infanta Elena ha vuelto a la agenda de la Familia Real por todo lo alto. Si durante los primeros cuatro meses del reinado de Felipe VI la primogénita de los Reyes eméritos no realizó ningún acto oficial, en estas dos últimas semanas ya ha cumplido con dos compromisos. El primero, asistir al funeral de la duquesa de Alba ofrecido en Sevilla en representación de los Borbones el pasado 20 de noviembre. El segundo, entregar los Premios Nacionales del Deporte este mismo jueves día 3 de diciembre.

Sin embargo, y muy a pesar de esta rentrée triunfal, la presencia de la hermana mayor del nuevo Rey en la agenda oficial de Zarzuela es cada vez más testimonial, como lo serán también los emolumentos que reciba por este trabajo de representación. Desde la proclamación de Don Felipe como Rey de España, Zarzuela se encargó de explicar que las cosas habían cambiado y que a partir de entonces ni la infanta Elena ni la infanta Cristina formaban ya parte de la Familia Real.

Desde el día de la Proclamación, la infanta Elena, hoy familia del Rey y no Familia Real, no cobra un sueldo o paga anual fija como antaño, sino que cobra por acto realizado, tal y como ha ocurrido durante años con la infanta Pilar, hermana del Rey emérito Don Juan Carlos. No se sabe cuál es la cuantía que percibirá por acto. Casa Real no quiere precisar aún esa cifra ante la pregunta de Vanitatis. Lo sabremos cuando se desvelen los presupuestos.

Aun con todo, lo que parece evidente es que percibirá una cantidad menor que antaño. Si en 2013 la infanta Elena presidió 32 actos y recibió 25.000 euros, cobró 781 euros por acto realizado. De respetarse estos precios o similares, desde la Proclamación hubiera acumulado en la columna del haber poco más de 1.500 euros. Por tanto, su paga menguaría a pasos agigantados. Se podría decir que hoy la infanta vive por tanto de sus réditos y de su trabajo en Mapfre.

Premio del deporte Infanta Elena

La decisión por parte de Felipe VI de enviar a la infanta Elena a Sevilla para presidir el funeral de la duquesa de Alba fue muy cuestionada en los medios de comunicación y en las redes sociales, ya que después de varios meses desaparecida del programa institucional de la Familia Real reaparecía en un acto que tendría que haber presidido alguno de los cuatro mayores representantes de la Corona. Por consiguiente, se la utilizó de 'comodín' porque ni Don Felipe ni Doña Letizia ni los Reyes eméritos podían asistir.

Pero en la entrega de los Premios Nacionales de Deporte su presencia está más que justificada, pues uno de los galardones, concretamente el que se otorga a la persona o entidad que más haya destacado por un gesto de nobleza o juego limpio en la práctica deportiva, lleva su nombre.