Máxima de Holanda, una ejecutiva en el desierto en su primer día en Jordania

Muchos son los viajes y compromisos que tiene Máxima de Holanda a lo largo del año. Y no solo en su papel de reina, sino también como asesora especial del secretario general de las Naciones Unidas, título que ostenta desde 2009, para promover la financiación inclusiva, especialmente en aquellas zonas más necesitadas o países en vías de desarrollo. Este último cargo es el que la ha llevado hasta Amán, la capital de Jordania, donde ha participado en una mesa redonda junto con otros líderes y trabajadores de la ONU para analizar los problemas con los que se encuentran y posibles iniciativas. Son temas que le interesan particularmente a Máxima, implicada cada vez más en la organización, especialmente desde que se convirtiera en reina, en abril de 2013.

Además de las reuniones oficiales, la esposa de Guillermo Alejandro pudo estudiar un poco el terreno, visitando algunas localidades como Zarqa, la ciudad más grande del país, solo por detrás de Amán. Allí pudo conversar con algunos grupos de mujeres empresarias y ver cómo las nuevas tecnologías llegan poco a poco a sus negocios. Y todo ello con la perpetua sonrisa que no se le borra ni con las recientes acusaciones de evadir impuestos en Argentina, una información de la que no ha habido un solo medio de comunicación de su país que no se haya hecho eco y sobre la que la propia reina dio explicaciones vía comunicado.

Máxima de Holanda se dejó en casa esta vez una de sus prendas fetiche, el sombrero, y a pesar de encontrarse en un país de mayoría islámica, apostó por llevar la cabeza al descubierto, con el pelo suelto sobre los hombros. La reina holandesa optó por la comodidad y para su visita a Jordania lució pantalones de cuadros con un jersey de cuello alto marrón. Y si hace unos días hablábamos de sus zapatos de vinilo, muy acordes con el estilo de la reina Letizia, no podemos obviar el abrigo que utilizó para sus diferentes compromisos y que destacaba por la ausencia de mangas. Un estilo que ya lució Letizia en 2017, con un chaleco blanco de la firma Massimo Dutti.

A pesar de encontrarse en Jordania, no ha tenido lugar todavía el ansiado encuentro con su homóloga, la reina Rania. Se espera que sea este martes cuando las homólogas se vean las caras. La última vez que se vieron tuvo lugar en su territorio, durante una visita de los soberanos jordanos a Holanda. Fueron unos días en los que las dos reinas protagonizaron un disputado duelo de estilo en cada una de sus apariciones y que, en esta ocasión, nos hemos quedado sin ver.