Beatriz de York y su papel clave (por el que ahora llora) en el hundimiento de su padre

Continúan surgiendo más revelaciones sobre cómo se gestó la desastrosa entrevista que el príncipe Andrés concedió a la BBC para zanjar el escándalo surgido tras su relación de amistad con el magnate acusado de abuso sexual a menores, Jeffrey Epstein.

Hasta ahora había trascendido que Sarah Ferguson fue una de las impulsoras de la disparatada idea que ha precipitado al príncipe Andrés al abismo. Tras la entrevista de Andrés, la imagen de este, que ya estaba tocada, ha quedado hundida.

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Pero ahora, una nueva información ha salido a la luz y salpica de lleno a Beatriz de York. Según ha revelado 'Daily Mail', Sarah Ferguson se mantuvo alejada de las reuniones con el equipo de Newsnight , ya que se encontraba en el extranjero cuando se finalizaron los detalles de la entrevista. Fue Beatriz, su hija mayor, la que parece que sí estuvo presente junto con la entonces secretaria privada de su padre, Amanda Thirsk.

Beatrice, de 31 años, y el príncipe Andrés se reunieron con la presentadora de Newsnight, Emily Maitlis, y el editor adjunto del programa, Stewart Maclean, en el Palacio de Buckingham tres días antes de la grabación.

Inicialmente, Beatriz se mostró escéptica a la idea de una entrevista televisiva, que inevitablemente profundizaría en la vida privada de su padre.

"Beatriz hizo muchas preguntas pertinentes y tenía sus dudas. Pero al final de la reunión, el equipo de Newsnight y Amanda Thirsk la convencieron de que no tenían otra opción, de que era la única forma de dejar atrás todos los rumores", ha afirmado una fuente al medio británico.

Tras el mal resultado que la entrevista ha tenido en la opinión pública, parece que Beatriz de York ahora lamenta no haber frenado a tiempo la idea de sentar a su padre frente a las cámaras.

La actuación del príncipe Andrés y sus secuelas parecen haber golpeado a Beatriz con fuerza. Fuentes cercana a su círculo más íntimo han desvelado en 'Daily Mail' que la princesa se mostró llorosa mientras organizaba una fiesta para el cumpleaños número 36 de su prometido en el exclusivo club nocturno Mayfair Annabel's, el martes por la noche.

Dicha fuente ha asegurado que lo que debería haber sido una celebración se convirtió en un evento solemne e incómodo. "Beatrice estaba triste, seria y sin maquillar, durante la cena de cumpleaños". "Parecía bastante llorosa en ocasiones. De hecho, Beatriz ha estado llorando todos los días desde que salió la entrevista".