Matilde y Elisabeth: los looks de madre e hija en el Día Nacional de Bélgica

Hoy Bélgica, y más concretamente su capital, Bruselas, se viste de gala. Se celebra su Día Nacional y, como no podía ser de otra manera, este año busca homenajear a todos aquellos ciudadanos que han ayudado a frenar la pandemia y recordar a las víctimas que el coronavirus ha dejado a su paso. También se celebra el 75º aniversario del final de la Segunda Guerra Mundial, aunque debido a las medidas de seguridad y prevención sanitaria, excepcionalmente, el tradicional desfile militar no tendrá lugar.

Lo que sí hemos podido ver es cómo la familia real de Bélgica al completo se ha reunido para sumarse a estos festejos. La primera parada ha sido en la catedral de San Miguel y Santa Gúdula de Bruselas, ahí han acudido puntuales y juntos el rey Felipe, la reina Matilde y sus cuatro hijos.

En cuanto a los looks elegidos para esta ocasión tan especial, sin duda destaca la presencia de la reina Matilde y la princesa Elisabeth. Madre e hija se han convertido en el centro de atención por lucir dos atuendos, cada uno acorde a su estilo y edad, que pasamos a analizar.

La mujer del rey Felipe, de nuevo fiel a su marca de moda de cabecera, Natan, se ha decantado por un vestido con un original y llamativo estampado jacquard que combinaba dos colores, el azul marino y el blanco roto. Se trata de un vestido de largo midi con el cuello camisero, manga al codo rematada con una pequeña abertura, cinturón confeccionado en el mismo tejido y una falda con vuelo. ¿Su precio? 795 euros.

La reina ha completado su look de cóctel con una maxipamela de color natural, guantes cortos y mascarilla en el mismo tono, cartera de mano de color azul marino y salones de ante en tono nude.

Por su parte, Elisabeth, que cada vez se posiciona con más fuerza como uno de los nuevos referentes de estilo royal a seguir, vuelve a enamorarnos con uno de sus looks románticos: un dos piezas vaporoso, diadema y, cómo no, mascarilla a juego.

Como parte de arriba, una blusa con lazada al cuello de manga larga y puños abullonados, y como parte de abajo, una falda de tiro alto más corta por delante y larga por detrás rematada con volantes. Ambas prendas están confeccionadas en un tejido fluido de color rosa empolvado y con un bonito estampado floral a contraste en tonos turquesa y coral.

La princesa heredera al trono de Bélgica ha unido su conjunto vaporoso a un clutch de piel trenzada de color naranja, una diadema en rosa palo, unos pendientes dorados en tamaño XL y unos salones nude.