Un día en la vida de Letizia: lo que hace la Reina cuando no tiene actos oficiales
Aunque su agenda esté vacía, doña Letizia trabaja en la sombra: desde reuniones privadas o seguimiento de temas en los que está involucrada hasta futuros discursos
Comenzamos el año laboral de los Reyes con una agenda semanal poco apretada, algo casi habitual en estas fechas desde que irrumpiera en nuestras vidas el coronavirus. Antes de eso -y afectada también el pasado año por el temporal Filomena-, esta primera semana del año solía concentrar varias reuniones de don Felipe y doña Letizia, que servían también como toma de contacto para el trabajo del resto de la temporada. Pero condicionada notablemente por la pandemia, la agenda de los Reyes ha sufrido grandes cambios en los dos últimos años. La curva de contagios es la que manda desde marzo de 2020, y a don Felipe y doña Letizia no les ha quedado más remedio que adaptarse a esta nueva normalidad.
Si echamos un vistazo a los datos de 2019, vemos que los Reyes cumplían con una media de cuatro o cinco actos semanales, siendo los meses de abril, mayo y octubre los más movidos, ya que es cuando se concentran más eventos. Sin embargo, en 2020 la media bajó enormemente, teniendo como máximo tres compromisos semanales, una cifra muy parecida a la de este 2021, aunque con la salvedad de que se han retomado los viajes internacionales, tanto como invitados como de anfitriones, haciendo que el número de actos públicos sea algo superior.
Pero el hecho de que no los veamos públicamente cada día no significa que ellos no sigan trabajando. Es más, cuando no tiene actos en la agenda, doña Letizia suele cumplir con un horario de oficina marcado, tal como cuentan a Vanitatis fuentes cercanas a la Reina.
Aunque algunos días -contados- los usa para irse de compras, algo que también entra dentro de sus funciones ya que se trata de ropa que luego utiliza para labores de representación, doña Letizia suele pasar el día en Zarzuela, donde tiene su despacho, muy cerca del de don Felipe. A pesar de que el del Rey lo hemos visto en numerosas ocasiones, sobre todo durante la primera ola de la pandemia, pues era allí donde se realizaban las videollamadas, el de la Reina es un secreto, ya que ella siempre ha preferido mostrarse en una sala minimalista con paredes blancas y algún que otro cuadro colgado.
El día a día de Letizia
El día de la Reina empieza a las 07:00 de la mañana cuando se levanta en su casa, el Pabellón del Príncipe, y desayuna con su familia. Si ese día no tiene acto por la mañana, y no tiene que pasar por las manos de su peluquera, Luz Valero, doña Letizia suele acercar a la infanta Sofía al colegio Santa María de los Rosales, que se encuentra a pocos kilómetros de distancia, en el madrileño barrio de Aravaca. Un gesto que, hasta hace unos meses, también hacía con la princesa Leonor y que seguro que, ahora que la heredera está estudiando en Gales, la Reina echa de menos.
Conduciendo ella misma, la Reina deja a su hija pequeña en la escuela y regresa a Zarzuela, donde empieza su jornada laboral. A veces le toca trabajar sola, y en ocasiones con don Felipe, cuando se trata de actos que comparten o viajes conjuntos, como los que han llevado a cabo este año a Suecia o Andorra. Doña Letizia invierte la mañana en diversos asuntos. "Tiene muchos contactos de despacho con temas que después tienen proyección pública o hace un seguimiento de asuntos que ha tratado en su agenda", nos cuentan desde Casa Real.
Otro de las actividades en las que ocupa estos días en blanco es la preparación de discursos, ya que es ella misma quien redacta sus locuciones, las revisa y las cambia, aunque luego, cuando está delante del micrófono, siempre les añade alguna palabra. No podemos olvidar, por ejemplo, las palabras que pronunció con motivo del 50º aniversario de su antigua facultad, el pasado septiembre, aportando historias personales. Doña Letizia cuida con suma atención todo lo que dice, ya que quiere que su mensaje sea claro y llegue a los españoles. Perfeccionista como la que más, elige con mimo cada palabra, como hacía ya en su época de periodista. Además, es muy habitual que añada algún matiz que deje claro lo involucrada que esté en el tema del que habla.
Muy involucrada
Aunque hubo unos meses en los que se cancelaron por la situación sanitaria, doña Letizia también preside reuniones en Zarzuela de las que no se informa públicamente. Un ejemplo de este tipo de encuentros fue una reunión que mantuvieron los Reyes con la familia de Ignacio Echevarría, el joven español que falleció en el atentado de Londres en junio de 2017 intentando salvar la vida de otros. Para reconocer su labor, invitaron a sus padres y hermanos a palacio de forma privada para mostrarles su apoyo a los pocos días del fallecimiento. Fue la propia familia la que, unos años después, sacaba a la luz la imagen de esta reunión privada de la que no se informó desde Casa Real.
La Reina también pone especial dedicación a sus viajes de cooperación. No se limita a viajar al lugar que la mandan desde la AEC (Agencia Española de Cooperación), sino que ella misma antes de viajar se reúne con los expertos para elegir cuál será su próximo destino, por qué debe visitarlo y en qué puede ayudar. Durante estos dos años, han sido dos los que ha realizado. El primero fue en diciembre de 2020 a Honduras, para llevar ayuda humanitaria a las zonas afectadas por los huracanes Eta e Iota. El segundo, hace pocas semanas, a Paraguay.
Durante este último año, hemos hablado con varias de las asociaciones, organizaciones y causas con las que Letizia se implica, algunas desde que llegara a la Casa Real por su boda con don Felipe, otras de forma más reciente. Y prácticamente todas coincidían en apuntar que es mucho más el trabajo que hace la Reina fuera de cámaras, el que el público no ve, que aquel al que tenemos acceso porque forma parte de su agenda pública. Desde su implicación con la Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención de la Mujer Prostituida, que ha empezado a visibilizarse no hace mucho, hasta su estrecha colaboración con la Asociación Española Contra el Cáncer o Feder, con la que precisamente inaugurará su agenda laboral de este 2022.
Comenzamos el año laboral de los Reyes con una agenda semanal poco apretada, algo casi habitual en estas fechas desde que irrumpiera en nuestras vidas el coronavirus. Antes de eso -y afectada también el pasado año por el temporal Filomena-, esta primera semana del año solía concentrar varias reuniones de don Felipe y doña Letizia, que servían también como toma de contacto para el trabajo del resto de la temporada. Pero condicionada notablemente por la pandemia, la agenda de los Reyes ha sufrido grandes cambios en los dos últimos años. La curva de contagios es la que manda desde marzo de 2020, y a don Felipe y doña Letizia no les ha quedado más remedio que adaptarse a esta nueva normalidad.