Meghan Markle cumple 41 años a la sombra del príncipe Harry

Este 4 de agosto Meghan Markle cumple 41 años en un momento en el que no parece tener muchos proyectos por delante y da la sensación de estar un poco apagada; al menos a lo que respecta a su vida laboral, sus proyectos con la televisión y sus apariciones públicas. Centrada más en su vida familiar y sus dos hijos, Archie y Lilibet Diana, la norteamericana parece no haber alcanzado el estrellato en su regreso a Estados Unidos.

Este último año apenas la hemos visto en público, y todas sus apariciones han estado relacionadas con su marido, el duque de Sussex. En este momento, parece estar a su sombra. En febrero Meghan y Harry se dejaban ver en público tras meses ceñidos a su ámbito privado. Fue cuando se subieron al escenario de la 53ª edición de los NAACP Image Awards para recoger el Premio Presidente que reconocía sus esfuerzos por visibilizar su apoyo a la comunidad afroamericana.

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Después, en abril, los Sussex acudieron a los Países Bajos con motivo de la celebración de los Invictus Games, tan ligados al príncipe Harry a lo largo de su biografía. Fue el primer viaje de Meghan a Europa desde que renunciaran como miembros de la realeza en 2020.

El segundo viaje a nuestro continente llegó en junio, cuando el matrimonio acudió a Londres con motivo de la celebración del Jubileo de Platino de la reina Isabel II. Su participación fue muy en segundo plano y ni siquiera hicieron su aparición en el tradicional posado en el balcón de Buckingham. Por último, hemos podido verles recientemente en Nueva York, cuando eran invitados a la Asamblea General de la ONU, en la que el príncipe Harry ofrecía un discurso.

Escasas apariciones en las que siempre les hemos visto juntos, eso sí, mostrándose unidos y de la mano. Pero poco sabemos de los proyectos profesionales de Meghan Markle. No se le conocen nuevos retos y algunos de los que tenía en el tintero no han seguido adelante, como el podcast que lanzaba en Spotify bautizado como ‘Archewell’ y que hablaba del feminismo como hilo conductor. Una labor que le habría traído algunos problemas a la duquesa, ya que Spotify habría tomado medidas contra los Sussex por no haber emitido episodios durante 2021, incumpliendo el contrato establecido. Su última publicación fue en marzo de 2022, siendo en total únicamente tres los podcast publicados, dos de ellos de 2020. Estaba previsto que Markle entrevistara a historiadores y expertos para desnudar los estereotipos que moldean a las mujeres en su imagen pública, pero todo parece haber quedado en agua de borrajas.

Además, habían firmado en septiembre de 2021 un multimillonario contrato con la plataforma Netflix para producir películas, incluida una serie documental sobre la naturaleza y una serie animada sobre mujeres con destinos notables. Pero en mayo esa serie animada conocida como 'Pearl' y producida por Markle era cancelada por la plataforma audiovisual por la caída de suscriptores.

Netflix sí mantenía sus otros proyectos en el aire con Archewell Productions, incluida la serie documental ‘Heart of Invictus’, centrada en los atletas de la última edición de los Juegos Invictus para veteranos de guerra, evento fundado por el príncipe Harry. También está previsto que la plataforma adelante el lanzamiento de la biografía de los Sussex, que en un principio se iba a estrena en 2023 y que podrían lanzar este mismo otoño, haciéndola coincidir con el estreno de la quinta temporada de ‘The Crown’ en noviembre.

Pero los problemas de Meghan se acrecentaban con el lanzamiento del último libro este pasado 21 de julio sobre su vida, que no le está trayendo más que disgustos. El periodista y biógrafo Tom Bower ha indagado profundamente en la vida de Meghan y cuenta en su libro ‘Venganza: Meghan, Harry y la guerra entre los Windsor’ un sinfín de anécdotas en las que la exactriz no sale nada bien parada y que protagonizan titulares casi a diario en la prensa británica.

Meghan llegaba a la familia real británica en 2016, año en el que conocía al príncipe Harry. Fue en verano y en una cita a ciegas como surgió la historia de amor de la norteamericana con el príncipe británico. Él sintió un flechazo nada más verla, en su primer encuentro organizado por la diseñadora Misha Nonoo en el restaurante Dean Street Townhouse del Soho en Londres. No fue una cita a solas, pero la complicidad enseguida hizo que estuvieran charlando largo y tendido puesto que el príncipe Harry ya se había fijado en ella gracias a su interpretación en la serie ‘Suits’.

Entonces le pidió su número y la escribió por WhastApp esa misma noche. Unos mensajes llenos de emoticonos que debieron de llegar al corazón de Meghan porque le concedió una segunda cita, al día siguiente y a solas. El príncipe se enamoró por completo y medio año después de su primer encuentro ambos viajaron a Botsuana, en África, para una escapada romántica de cinco días. Se comprometieron el 27 de noviembre de 2017 y hacían públicas una serie de fotografías de lo más románticas que indicaban que estaban muy enamorados. La fecha de la boda se fijó para el 19 de mayo de 2018, que tuvo lugar en la capilla de San Jorge en el castillo de Windsor.

Desde entonces y hasta su huida de Inglaterra pasaron apenas dos años, puesto que los duques de Sussex decidían irse a vivir a Estados Unidos en 2020, a raíz de su ruptura con la Casa Real británica como miembros activos. Meghan pensaba entonces que su futuro en Estados Unidos tenía una prospección difícil de alcanzar para ella en Reino Unido dentro de la Casa Real. Podría retomar sus contactos como actriz y perfilarse un futuro prometedor como una superestrella, un futuro que parece no haber llegado y que mantiene a Meghan bastante apartada de la escena pública.