Gran fiesta de Haakon y Mette-Marit por su 50 cumpleaños: 400 invitados y cena distendida

El pasado 19 de agosto, la princesa Mette-Marit cumplió 50 años. Lo hizo después de un mes de que su esposo, Haakon de Noruega, alcanzara también esa edad el pasado 20 de julio.

En el caso del príncipe heredero, lo celebró en familia, en la intimidad, y en el día del cumpleaños de la nuera del rey Harald y la reina Sonia, la Corte Real de Noruega quiso homenajear a Mette-Marit con varias fotografías inéditas, entre las que se encontraban un nuevo retrato oficial de la princesa así como imágenes de su infancia y familiares.

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N.Tiburcio

Además, en la página web oficial de Palacio, se abrió un libro virtual donde todo el que quisiera podía dejar un mensaje cariñoso a la princesa heredera.

Pero aún quedaba la traca final para que Mette-Marit y Haakon celebraran por todo lo alto, juntos y públicamente sus respectivos 50 cumpleaños. La pareja había planeado una fiesta en los jardines del Palacio Real de Oslo que se ha llevado a cabo el viernes 25 de agosto y que ha sido retransmitida por televisión.

La fecha no estuvo escogida al azar. Se trata del día en el que se cumple el 22º aniversario de boda de Haakon y Mette-Marit.

"Junto con gente de todo el país, la pareja de príncipes herederos aprovechará la oportunidad para celebrar la Noruega que hemos ayudado a formar durante estos 50 años", comunicó Palacio en su momento, cuando se anunció que esta gran fiesta se llevaría a cabo.

A la gran celebración han acudido 380 invitados, tal y como informó el responsable de comunicación del Palacio, Guri Varpe.

En la lista, además de la familia de los protagonistas, estaban incluidos representantes oficiales de la Noruega como el presidente del parlamento y del gobierno noriegos, el juez del Tribunal Supremo, los líderes parlamentarios, así como los administradores estatales. También acudieron representantes de organizaciones que la pareja real patrocina, así como un grupo de colaboradores a lo largo de los años y personas que han conocido en sus viajes durante más de 20 años.

Todo estaba preparado en el patio trasero del castillo de Oslo, decarodo al detalle. Un total de 48 mesas fueron instaladas y en cada una de ellas se sirvió una tarta de cumpleaños decorada con frutos rojos y pequeñas piezas dulces con una corona dorada impresa en ellas, en cada mesa.

Durante la velada, no han faltado los discursos de agradecimiento, una suculenta cena, música y buen ambiente y una suculenta cena que ha constado de unos aperitivos de tomate, mozzarella noruega y plantas silvestres, así como pan y mantequilla, así como de plato principal de barbacoa que ha incluido, entre otras cosas, pescado y ternera, ensalada mixta, mini zanahoria con queso fresco y piñones, brócoli con naranja y pipas de calabaza, chimichurri, hummus y sashimi de salmón.Gran parte de la comida que se ha servido es orgánica y varios de los platos también son vegetarianos.

Como postre, los invitados y la dfamilia real han podido degustar la tarta de cumpleaños con frutos rojos y helado con frambuesas.

En cuanto al look de la protagonista, Mette-Marit se ha decantado por un vestido blanco semicalado con bordados de flores, de manga corta y falda larga, un estilismo que ha contrastado con el colorido estampado del vestido de su suegra, la reina Sonia.

Fueron muchas las palabras cariñosas que la pareja recibió durante la velada, entre ellas las de la reina Sonia, que aseguró que "el rey y yo estamos profundamente agradecidos por el apoyo que nos brindáiss y por la relación confidencial entre nosotros. Todos tenemos nuestra singularidad, por la cual siento que nos respetamos unos a otros".

Añadió que está impresionada por cómo la pareja ha encontrado su propio camino.

Sin embargo, fueron los hijos de Haakon y Mette-Marit, la princesa Ingrid Alexandra y el príncipe Sverre Magnus, quienes encantaron a los asistentes hablando sobre sus padres.