Carlos III y Camila aterrizan en Canadá para su viaje más simbólico: del vestido abrigo al broche con diamantes que también llevó Kate Middleton

Desde que Trump llegó al poder, su política internacional ha provocado muchos efectos colaterales. Si bien la voluntad del presidente de Estados Unidos de anexar Groenlandia provocaron la respuesta del rey Federico X de Dinamarca, Carlos III ha hecho lo propio con Canadá. Tras la celebración de las elecciones generales, ha viajado junto a Camila para la inauguración del Parlamento. “Son conscientes de que será una visita corta, pero que esperamos tenga un gran impacto”, informó PA, citando a un portavoz del palacio.

Se trata del primer viaje de Carlos III a Canadá como jefe de Estado, por lo que su primera parada ha sido Ottawa, capital federal del país. Allí han aterrizado pasadas las 13de la tarde (hora local), donde fueron recibidos por una comitiva de la Policía Real Montada de Canadá y las Fuerzas Armadas Canadienses. Además, se encontraba el recién nombrado primer ministro, Mark Carney, y su esposa Diana Fox Carney.

Mientras que el Rey llevaba una corbata estampada de color rojo oscuro, muy parecido a la tonalidad predominante de la bandera canadiense, la Reina rescató una de sus prendas más llamativas de Anna Valentine. Se trata de un vestido abrigo rosa con manga larga y flecos en cuello y frontal. Una prenda que escogió para asistir a la boda del príncipe Harry y Meghan Markle en 2018.

Consciente de la fuerza del viento al aterrizar, Camila decidió no llevar pamela, a diferencia de otras veces que sí la había usado con ese abrigo. Eso sí, lo combinó con zapatos de Chanel y el broche de hoja de arce que perteneció a la reina Isabel II. Se trata de una pieza de joyería con forma de hoja de arce en platino y adornado con diamantes que simboliza la conexión de la monarca con el país norteamericano.

El broche le fue regalado a Isabel II por el rey Jorge VI en 1939 para su primera visita a Canadá. Sin embargo, no solo lo utilizó ella, también su hija, la princesa Ana, o Kate Middleton durante sus visitas oficiales, aunque esta es la primera vez que Camila lo utiliza.

Entre las anécdotas a su llegada, la Reina recibió un ramo de flores de un joven local de Ottawa y escucharon a los Eagle Island Singers de Kitigan Zibi, reserva india canadiense. “Su visita histórica es un recordatorio del vínculo entre Canadá y la Corona, un vínculo forjado a lo largo de generaciones, moldeado por historias compartidas y basado en valores comunes”, expresó el primer ministro Mark Carney a través de redes sociales. Fue él quien consideró la visita como un “mensaje claro de soberanía”, como dardo directo a Donald Trump, quien será el asunto a evitar estos días.