¿Caducan también el champú y el resto de los productos para el pelo?
Al igual que ocurre con el resto de cosméticos para el cuidado de la piel, los productos para el pelo también caducan. Así se sabe cuando un champú está en buen estado.
Puede ser que tu pelo no necesite ser lavado con mucha frecuencia, que atesores varios tipos de champús y uses uno diferente dependiendo de cómo sientas tu melena o incluso que tengas un bote en tu casa habitual y otro en la de la playa. El caso es que a ti tanto el champú como el acondicionador y resto de productos capilares te suelen durar bastante tiempo. Esto puede ser genial para tu bolsillo, pero también puede llevarte a preguntarte cuánto tiempo trascurre antes de que se caduquen y qué pasa si los usas una vez ha expirado este.
“La caducidad de los productos cosméticos se refiere a la fecha límite hasta la cual se considera seguro utilizarlos. Es el periodo durante el cual mantienen su calidad, eficacia y seguridad”, explica Teresa Climent, licenciada en Farmacia y Technical Manager de Nuggela & Sulé, quien también recuerda que esta es diferente al PAO (Period After Opening). “Este valor que proporciona una guía sobre cuánto tiempo se considera seguro utilizar un producto cosmético después de abrirlo, pues después no se garantiza que mantenga su calidad, eficacia y seguridad”.
La fecha de caducidad de las referencias capilares puede variar según el tipo de cosmético y de su formulación. “Algunos tienen una vida útil más larga, mientras que otros, especialmente aquellos que contienen ingredientes naturales o que están expuestos a más contaminación, pueden tener un recorrido más corto”, añade la experta.
Qué pasa si el producto se ha caducado
La mayoría de champús, acondicionadores y mascarillas duran en condiciones óptimas un mínimo de seis meses, una vez se ha abierto el envase. Pero si has comprado el producto y lo tienes guardado, sin usar ni abrir, su vida puede llegar a ser de dos a tres años. Eso sí, si alguno de ellos se ha caducado o estropeado, puede volverse inestable, perder su eficacia y, lo más peligroso, podría irritar el cuero cabelludo o dañarlo.
“Si accidentalmente utilizas un champú o acondicionador que ha caducado, lo más probable es que no experimentes ningún problema significativo. En la mayoría de los casos, este no causará efectos adversos graves”, asegura la farmacéutica. Lo que sí que puede ocurrir es que “pierda efectividad y que no proporcione los resultados deseados, como son limpieza profunda, hidratación o protección del pelo. Además, es probable que algún ingrediente químico pudiera secar el cabello, restarle brillo o dañarlo”, añade Raquel González, cosmetóloga y directora técnica de Perricone MD.
En el peor de los casos es posible sufrir una dermatitis de contacto al usar un producto capilar en mal estado, especialmente si está caducado o ha sido contaminado por bacterias u otros microorganismos. “Esta es una reacción inflamatoria de la piel que ocurre cuando entra en contacto con una sustancia irritante o alergénica, como le ocurre a algunas personas con los tintes capilares, a pesar de que estén en fecha”, comenta Sonia Ferreiro, biotecnóloga y cosmetóloga en Byoode.
Cómo reconocer un producto capilar caducado
La forma más fácil de saber si tu champú, acondicionador o mascarilla han caducado es comprobar la fecha de caducidad que figura en el envase. En este encontrarás un icono en el que está dibujado un tarrito con un número seguido de una M (6M, 12M, 18M o 24M); el número indica los meses que el cosmético es óptimo después de haberlo abierto por primera vez. Sin embargo, también hay unos signos a los que debes de estar atenta por si acaso no te acuerdas de cuándo los abriste:
- Textura. “Como los productos capilares contienen una gran variedad de ingredientes, cuando no están en buen estado pueden experimentar cambios de textura pero también a nivel químico. Y esto se debe a un proceso de oxidación, hidrólisis, descomposición de ingredientes activos o interacciones entre distintos componentes”, aclara González. Pero la viscosidad y la consistencia también pueden dar pistas de si está o no en buen estado. Por ejemplo, algunos polímeros presentes en productos capilares pueden sufrir cambios en su estructura cuando están pasados de fecha, lo que afecta a la citada viscosidad. También se podría observar una separación de fases, por ejemplo, en emulsiones, que es como se denomina a las mezclas de agua y aceite. Con el tiempo las fuerzas de cohesión entre las moléculas pueden debilitarse, lo que provoca la separación de las fases en capas distintas debido a la falta de estabilidad.
- Separación de ingredientes. Puede ocurrir cuando los componentes de la fórmula no están bien emulsionados o se descomponen con el tiempo. Por ejemplo, un champú o acondicionador, podría presentar una separación visible en la que los ingredientes líquidos se separan de los sólidos, formando capas distintas en el envase.
- Color. Los cambios de tonalidad son la señal más obvia de que algo va mal. Con el tiempo, los pigmentos también se pueden degradar como consecuencia de haber estado expuestos a la luz, al oxígeno y a otros factores ambientales; incluso pueden emerger bacterias. “Si el producto se ha contaminado no es raro que aparezcan microorganismos, como bacterias o hongos, de los que es fácil darse cuenta si surgen manchas e incluso se forma una capa de moho”, advierte la directora técnica de Perricone MD.
- Olor desagradable. “Este puede deberse a la degradación de los ingredientes o a la proliferación de microorganismos. A medida que los primeros se descomponen, pueden producir compuestos volátiles que generan un aroma rancio, ácido o incluso putrefacto”, declara Climent.
Apúntate el truco final para saber si un cosmético es seguro para ti que te brinda la Technical Manager de Nuggela & Sulé. Se llama la “prueba de la tirita” y para llevarlo a cabo tienes que aplicar un poco de producto en una zona pequeña del antebrazo o detrás de la oreja. Después cubre el área con una tirita y deja que actúe de 24 a 48 horas. Si no se produce ninguna reacción adversa, como enrojecimiento, irritación, picazón, inflamación o erupciones cutáneas, lo más probable es que sea seguro de utilizar en tu piel.
Puede ser que tu pelo no necesite ser lavado con mucha frecuencia, que atesores varios tipos de champús y uses uno diferente dependiendo de cómo sientas tu melena o incluso que tengas un bote en tu casa habitual y otro en la de la playa. El caso es que a ti tanto el champú como el acondicionador y resto de productos capilares te suelen durar bastante tiempo. Esto puede ser genial para tu bolsillo, pero también puede llevarte a preguntarte cuánto tiempo trascurre antes de que se caduquen y qué pasa si los usas una vez ha expirado este.