El pantalón de lentejuelas que no sabías que querías, pero quieres, es de Zara

La llegada de la nueva colección de Zara a las tiendas nos está dejando muy gratamente sorprendidos. Incluyendo las prendas de edición limitada, que son casi un objeto de colección.

No podrás negarlo al ver el pantalón de lentejuelas del que nos hemos enamorado en Zara. Divertido, juvenil y muy favorecedor, esta pieza debe estar en tu armario este año.

Se trata de un pantalón culotte de lentejuelas amarillas con tiro alto y detalle blanco en el bajo. A la venta por casi 50 euros, promete hacer las delicias dentro y fuera de Instagram.

Hemos visto culottes en tejido vaquero, de piel, lino, algodón... Pero llega Zara y nos vuelve a sorprender. Nos encanta por su corte, ya que al ser un pantalón tipo culotte es muy favorecedor para todo tipo de siluetas. Además de estilizar la figura, es ideal para cualquier ocasión por su largo. Sin embargo, la auténtica clave está, obviamente, en sus lentejuelas.

Al tener lentejuelas grandes tipo XXL en ese tono amarillo pastel, es mucho más ponible de lo que creerías en un primer vistazo. Te pedimos por favor que des un salto de fe.

Póntelo durante tus salidas nocturnas, sí, pero es casi una obligación que lo uses de día. Sea para tus eventos más formales, por ejemplo para acudir a una boda, o para ir a la oficina. Pierde el miedo a los brillos y disfruta de su movimiento bajo el sol.

Aunque no dejamos de ser realistas, el pantalón en sí nos da mucho juego para combinarlo con camisetas y tops de distintos tejidos y colores, pero para el día a día si no quieres arriesgar tanto, apuesta por el blanco más básico.

Una camisa de organza blanca, como la de la imagen, está disponible en Zara por 26 euros. Al igual que la camiseta con volumen en las mangas, a la venta por 20 euros. Respecto a los zapatos, de nuevo prima la sencillez, como estas sandalias blancas de 36 euros.

Sal de tu zona de confort, deja por unas horas los tonos pastel o tierra y da el salto. Ya te estamos imaginando moviendo tu cadera mientras subes las escaleras del metro para ver cómo se mueven las lentejuelas.

Así los madrugones se llevan mejor.