Es noticia
Menú
Vega Royo-Villanova: trufas de chocolate, looks 'total black' y un libro-joya de Stefan Zweig
  1. Estilo
  2. Ocio
PARADA OBLIGADA CON...

Vega Royo-Villanova: trufas de chocolate, looks 'total black' y un libro-joya de Stefan Zweig

Afincada la mayor parte del tiempo en Estados Unidos, donde vive con su familia, Vega es —desde hace cuatro años— directora de comunicación de Los Encajeros, la firma vasca de ropa de cama y para el hogar más exclusiva

Foto: Vega Royo-Villanova, directora de comunicación de la firma textil Los Encajeros. (Cortesía)
Vega Royo-Villanova, directora de comunicación de la firma textil Los Encajeros. (Cortesía)

Prescriptora de estilo, emprendedora y pionera en el mundo de los blogs de estilo de vida en España, Vega Royo-Villanova (Madrid, 1980) comenzó su trayectoria profesional en el mundo de la moda en Christian Dior con apenas 21 años para marcharse, tiempo después, a recorrer el mundo como periodista internacional. Tras vivir en ciudades tan dispares como Kuala Lumpur, Atenas, Bangkok, Zúrich o París, desde hace cuatro años es directora de comunicación de la firma textil Los Encajeros, con clientes en todo el planeta, “un trabajo soñado” —apunta nuestra protagonista— que le permite desarrollar aún más su talento natural como anfitriona y relaciones públicas.

Casada con el financiero y empresario argentino Marcelo Berenstein, madre de dos hijos y apasionada de los viajes, la moda, la decoración y la gastronomía, la vida cosmopolita de Vega transcurre a golpe de avión entre Miami, Nueva York y Madrid, su ciudad natal. “Tengo un espíritu muy nómada, muy libre. No me asusta la aventura. Podría irme mañana mismo a vivir al otro extremo del mundo y sería igual de feliz”. Atentos a su lista secreta de direcciones VIP en territorio español.

placeholder Vega Royo-Villanova, prescriptora y empresaria. (Pau Palacios)
Vega Royo-Villanova, prescriptora y empresaria. (Pau Palacios)

PARA COMER

El desayuno más sabroso: “Cualquiera que tome en la pastelería Arrese (Alameda de Recalde, 24) de Bilbao; nunca falla el mítico bollo de mantequilla o un croissant recién hecho. Por no hablar de sus trufas de chocolate; siempre tengo una caja en mi casa de Madrid. Si me lo preparo en casa, un té matcha y unos huevos fritos con aguacate”.

A mesa puesta: “Si es para almorzar con amigas solemos quedar en El Velázquez 17 (Velázquez, 17), en Madrid. Soy adicta a sus patatas fritas trufadas, las berenjenas crujientes y los escargots vegetarianos, ¡solo pensarlo me hace querer volver allí ahora mismo! ¿Mi último paraíso gastro? La Bodega de Garelos (Monte Esquinza, 26), un gallego pequeño, pero muy elegante donde comes de película. El dueño es superatento y la ensaladilla rusa, la mejor de Madrid”.

¿Tomamos un aperitivo?: “Propongo ir a la terraza de Hevia (Serrano, 118); en Navidad tiene un ambiente genial y hasta cantan villancicos. También me encanta ir de tapas al mediodía por el madrileño Barrio de las Letras; la taberna La Dolores (Pl. Jesús, 4) con las cañas de cerveza mejor tiradas de la ciudad y Cervantes (Jesús, 7) con sus tostas deliciosas, son dos paradas fijas”.

Brindis de lujo: “Para ocasiones especiales elijo un Marqués de Riscal, porque sé que nunca me va a fallar. Suelo encargar las cajas de tinto y blanco directamente a la bodega y siempre tenemos en casa”.

Templo gourmet: “El mercado de Chamartín (Bolivia, 9), en Madrid. Recuerdo ir con mi madre cuando era pequeña y me encanta seguir la tradición de visitarlo cada semana. Hay una pollería muy pequeña que hace esquina donde me preparan la carne picada y unos filetes rusos de morir. Ojalá nunca la cierren”.

PARA COMPRAR

Básicos de moda: “Desde que viví en Nueva York he comprendido la comodidad de vestir en negro casi a diario; favorecedor, fácil y elegante a la vez. Así que casi siempre apuesto por el 'total black', con mucho jersey, chaqueta y top de Again Cashmere (Serrano, 76) que es imbatible en calidad-precio. Cada vez compro menos y de mejor calidad. No soy muy de marcas de lujo internacionales. Apuesto siempre por diseñadores españoles: Bouret, Kolonaki Madrid, Pistache Vintage, Jorge Redondo, Encinar Brand, Dragon Girl, Color Nude, IQ Collection y Dear Prudence. Aunque acabo de descubrir una firma colombiana que me ha conquistado: Padova (Serrano, 46). ¿Mi último flechazo fashion? Una falda negra con volante y topos de terciopelo de Carmen Fitz Moda Flamenca”.

Más flores: “Siempre tengo flores frescas en casa —también me gusta mandarlas a casas de amigos— y las compro en Flores Pili (Pl. Sagrados Corazones, 2), como han hecho mis padres toda la vida. Adoro a Pili porque conoce mis gustos y crea ramos maravillosos. Otras veces voy a Brumalis (Conde de Aranda, 10) porque me encanta el buen gusto de Mari Luz Peñalver para crear composiciones mágicas. ¿Mis flores favoritas? Los tulipanes y las hortensias”.

Detalles deco: “Compro casi todo en subastas. Me encantan. Los últimos lotes que me he llevado han sido un cuadro grande de caza en Aragón Subastas (Joaquín Sanz Gadea, 4) en Zaragoza y unos candelabros de plata y dos marcos estilos Luis XVI de Greco Subastas (General Perón, 19) en Madrid. Para vestir la casa, sábanas, juegos de toallas y mantelerías de Los Encajeros (Núñez de Balboa, 34). ¿Una posesión especial? Una vajilla verde agua con animales de Vista Alegre”.

Hora de lectura: “Suelo comprar mis libros en Troa Librerías (Serrano, 80); mis hijos me acompañan muchas veces porque tienen una selección fantástica de literatura infantil. ¿El último que he incorporado a mi biblioteca? 'El mundo de ayer', de Stefan Zweig; no entiendo como no me lo había leído antes. Me ha enamorado de principio a fin”.

PARA CUIDARME

Momento beauty: “Cuido mi pelo en Ananda Ferdi (Joaquín Costa, 51) donde Rosi Fernández me hace el color supernatural. En casa utilizo todos los productos de Moncho Moreno, desde su cepillo de pelo hasta el aceite hidratante. Para aplicarme bótox voy a la Clínica Ortega y Gasset (Ortega y Gasset, 53); la Dra. Elena Fernández pincha como los ángeles y también me hace el IPL luz pulsada para las manchas, radiofrecuencia una vez al mes y láser. Para limpieza y masajes faciales acudo, desde hace quince años, a Katy —las mejores manos de Madrid— en Slowlife Beauty (General Pardiñas, 47)”.

En forma: “Soy motera, me muevo de un lado a otro de la ciudad con mi scooter. Voy al gimnasio Holmes (Monasterio de Arlanza, 20) casi todos los días y, como soy muy delgada, hago poco cardio y mucha fuerza y musculatura. En cuanto a deportes, me gusta esquiar, hacer surf y montar a caballo. Lo que no hago casi nada es caminar. No tengo tiempo”.

En mi neceser: “Amo las barras de labios, coloretes y bases de maquillaje de Sisley, que complemento con los sérums de Dr. Zelens que compro en Tacha Beauty (Pº de la Castellana, 60) y el tónico P50 de Bioligique. Y no puedo vivir sin el bálsamo labial Eight Hour de Elizabeth Arden. Tengo uno en cada bolso y otro en el coche”.

Perfume adicta: “Colecciono perfumes desde niña, así que imagina cómo está mi cuarto de baño. No cabe ni uno más. A diario uso el de higo de Ortigia Sicilia, que compro on line, y otros de mis imprescindibles son los cítricos de Rochas. Además, estoy enamorada de las velas y los ambientadores para el hogar de G19 Pharmacy (Goya, 19) en Madrid. Tienen uno para los dormitorios de los niños que les encanta”.

PARA VIAJAR

Hotel top: “El Adrére Amellal en Siwa, Egipto, una joya escondida en medio del Sáhara, rodeado de olivos, palmeras, muchos lagos y miles de manantiales donde no hay electricidad y desconectas —de verdad— de todo. Además, puedes hacer excursiones en un todoterreno por el desierto o cenar bajo las estrellas del Sáhara con los bereberes cantando. Creo que nunca he estado en un lugar tan mágico”.

Una tarde en el museo: “El Prado es mi favorito porque reúne a los pintores que más me gustan: El Bosco, Goya, Velázquez, El Greco, Tiziano y Ribera. En el MoMA de Nueva York también encuentro siempre exposiciones espectaculares. Otros museos que me ha encantado conocer son el Museo Magritte en Bruselas y el Rodin en París, con jardines asombrosos. ¿Un cuadro que me gustaría ver colgado en mi casa? 'El Jardín de las Delicias', Bde El Bosco, que, por cierto, también fascina a mis hijos”.

De concierto: “No soy muy de ir a conciertos, pero me encantaría volver a ver en directo a Julio Iglesias; llevo escuchando sus canciones toda la vida y creo que no hay un cantante español que me haya marcado tanto como él. Para mi, es una leyenda”.

Un destino en el mundo: “La playa de Berria, en Santander, porque veraneo allí desde pequeña y ahora voy con mi familia cada mes de julio. En Cantabria hacemos vida de ascetas”.

Prescriptora de estilo, emprendedora y pionera en el mundo de los blogs de estilo de vida en España, Vega Royo-Villanova (Madrid, 1980) comenzó su trayectoria profesional en el mundo de la moda en Christian Dior con apenas 21 años para marcharse, tiempo después, a recorrer el mundo como periodista internacional. Tras vivir en ciudades tan dispares como Kuala Lumpur, Atenas, Bangkok, Zúrich o París, desde hace cuatro años es directora de comunicación de la firma textil Los Encajeros, con clientes en todo el planeta, “un trabajo soñado” —apunta nuestra protagonista— que le permite desarrollar aún más su talento natural como anfitriona y relaciones públicas.

Tendencias
El redactor recomienda