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La duquesa de Suárez y su marido: casa nueva para su futura familia
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ARISTOCRACIA

La duquesa de Suárez y su marido: casa nueva para su futura familia

Tras la experiencia de Singapur, Alejandra Romero Suárez y Pedro Armas se instalaron definitivamente en Madrid. Hace unos meses adquirieron un piso en Chamartín

Foto: Alejandra Romero Suárez, en una imagen de archivo. (Getty)
Alejandra Romero Suárez, en una imagen de archivo. (Getty)

En medio de esta crisis sanitaria, con la crónica rosa convertida en crónica negra el 90% del tiempo, la noticia del embarazo de la duquesa de Suárez ha sido como un rayo de luz. La joven, que cumplió 30 años en enero, será madre a finales del verano de una niña que se llamará Mariam, fruto de su matrimonio con Pedro Armas García. Ha escogido el nombre de su madre, que falleció cuando ella apenas tenía 14 años víctima del cáncer. La vida se abre paso y aporta esperanza en estos tiempos inciertos.

No se conocen muchos más datos (los que sabemos los publicó '¡Hola!') sobre el acontecimiento porque la nieta del expresidente Adolfo Suárez ha decidido llevar una vida discreta, alejada del foco. Alejandra Romero está en línea con muchos de los aristócratas de la nueva generación, para quienes llevar el título es un orgullo histórico que no implica necesariamente exposición mediática. Tras la polémica que supuso su lucha legal por considerarse con mejor derecho que su tío Adolfo a llevar el título (algo que la ley avaló), su vida volvió a la normalidad y apenas se ha salido del guion. En abril de 2018 se casó en el Club Puerta de Hierro con su pareja, el abogado Pedro Armas, en una ceremonia a la que faltaron varios miembros de la familia materna. Al exclusivo Club solo tienen acceso los socios (los invitados a eventos tienen que identificarse para entrar) y así evitaron el barullo mediático. Se casaron sin invitados del mundo empresarial, político o social que pudieran generar más interés del debido. El perfil era el de amigos y compañeros de trabajo de los novios, según contó en su día Vanitatis.

placeholder Alejandra Romero y su marido, Pedro Armas. (Lagencia Grosby)
Alejandra Romero y su marido, Pedro Armas. (Lagencia Grosby)

Romero es hoy una profesional más, abogada asociada del bufete angloaustraliano Herbert Smith Freehills, con sede en Madrid. Se trata de una de las firmas más destacadas de la abogacía de los negocios de nuestro país, donde cuenta con una plantilla de más de 110 profesionales, 15 de ellos socios. Están especializados en grandes operaciones de fusiones y adquisiciones, financiaciones y en el asesoramiento integral de proyectos de sectores de energía, infraestructuras o inmobiliario, entre otros. Es la tercera firma más productiva por abogado.

200 metros cuadrados

Romero está centrada en el sector inmobiliario, ha asesorado a clientes nacionales e internacionales en la adquisición de activos inmobiliarios importantes. Su mano ha estado en operaciones de tanto calado como la inversión por parte del fondo de riqueza soberana de Singapur de 244 millones de euros en la adquisición de 11 edificios en España. O en la macrooperación que llevó al gestor de activos inmobiliarios AEW Europe a comprar el Mercado de Fuencarral por 50 millones de euros en 2017. Actualmente el despacho ha aplicado un ERTE por el que ha reducido un 20% de su sueldo (y de sus horas) a sus trabajadores.

Aunque Alejandra Romero y su marido, Pedro Armas, pasaron un tiempo en Singapur (hoy una de las referencias en la gestión de la pandemia) mientras ella trabajaba allí y él estudiaba un máster, llevan meses ya reinstalados en Madrid, donde están pasando el confinamiento mientras esperan la llegada de su hija. Y como el casado, casa quiere, que dice un refrán español, revelan a Vanitatis que la pareja ha adquirido recientemente un piso en el barrio de Chamartín. Se trata de una luminosa vivienda de más de 200 metros cuadrados con dos plazas de garaje que además cuenta con piscina y jardín en las zonas comunes. Al parecer, la duquesa y su esposo la compraron a finales del año pasado.

placeholder Alejandra guarda un gran parecido con su madre, Mariam Suárez. (Getty)
Alejandra guarda un gran parecido con su madre, Mariam Suárez. (Getty)

Bien podría haber firmado la venta el padre de Pedro, Pedro Armas Omedes, notario. El marido de la duquesa de Suárez proviene de una familia de juristas muy reputada. Además de su padre notario, su madre, Susana García Santa Cecilia, es magistrada, actualmente en servicios especiales en el Consejo General del Poder Judicial.

Armas estudió, como Alejandra, en el colegio jesuita Nuestra Señora del Recuerdo. Según la prensa asturiana (él no ha hablado nunca con la prensa), jugó al hockey con el Grupo Covadonga y llegó a ser internacional con la selección española juvenil. En algún momento descubrió que aquello no era lo suyo, y hoy tiene una prometedora carrera que nada tiene que ver con el deporte. Tras una etapa en Amazon, el joven abogado ha cambiado de trabajo. Desde hace menos de un año es VP de Servicios Globales de Jobandtalent, que presume de ser la única empresa de trabajo temporal del mercado y fue fundada en 2009 por Juan Urdiales y Felipe Navío en Madrid.

Ambos, filántropos

Además, Armas está muy implicado en la ONG que fundó hace más de siete años junto a unos amigos. "Un grupo de jóvenes españoles unimos nuestras fuerzas e ilusión en noviembre de 2013 para constituir Más Por Ellos, una asociación dedicada a la cooperación para el desarrollo en comunidades vulnerables de Kenia", explican en su página web. Actualmente trabajan en Kenia y Zambia bajo el nombre de Kubuka y se dedican a fomentar el desarrollo sostenible en las comunidades en las que trabajan, aportándoles educación y herramientas para el emprendimiento.

En esto de poner un granito para ayudar a los demás, tanto Pedro como Alejandra dan ejemplo. Según publicó 'Vanity Fair', Alejandra ha colaborado impartiendo clases de inglés y matemáticas a madres en riesgo de exclusión social en el Centro de Apoyo y Encuentro de Familia Mariam Suárez, centro fundado en homenaje a su progenitora.

En medio de esta crisis sanitaria, con la crónica rosa convertida en crónica negra el 90% del tiempo, la noticia del embarazo de la duquesa de Suárez ha sido como un rayo de luz. La joven, que cumplió 30 años en enero, será madre a finales del verano de una niña que se llamará Mariam, fruto de su matrimonio con Pedro Armas García. Ha escogido el nombre de su madre, que falleció cuando ella apenas tenía 14 años víctima del cáncer. La vida se abre paso y aporta esperanza en estos tiempos inciertos.