El proyecto desconocido y gourmet de Carlos Fitz-James Stuart, el novio del año
El hijo pequeño del duque de Alba protagonizará hoy la gran boda de la temporada, un enlace que nos ha permitido descubrir los detalles de su proyecto más secreto
Carlos Fitz-James Stuart y Solís, además de conde de Osorno, se ha ganado a pulso esta temporada el título de novio del año. Hijo menor del duque de Alba y Matilde Solís, entonará bien alto el ‘sí, quiero’ este sábado, 22 de mayo, en los jardines del palacio de Liria en una boda que se convertirá en la más comentada desde el inicio de la pandemia. Hace mucho tiempo que no vivimos un enlace de esta magnitud y repercusión, y su protagonista, uno de los menos mediáticos de la Casa de Alba, nos suscita muchísima curiosidad.
A pocos meses de cumplir 30 años, Carlos Arturo (su nombre completo), a pesar de su presencia en los medios desde su nacimiento el 29 de noviembre de 1991, ha conseguido mantener un perfil bajo hasta las pasadas Navidades, cuando anunció la fecha de su boda con Belén Corsini Lacalle, miembro de la Tribu, apodo con el que se conoce a la familia que crease hace dos generaciones la constructora Corsán Corviam. Un gigante empresarial capaz de dar vida a una prolífica saga de empresarios que Belén ha seguido laboralmente a pies juntillas. Mano derecha de su padre en los negocios, se sabe más de ella que de él, a pesar de que la fama le viene desde la cuna.
Tras estudiar la carrera de Comercio en el College For International Studies (CIS) de Madrid (la misma universidad que otros cachorros de la jet como Froilán, Almu Lapique o Iria Fernández-Tapias), Carlos hizo un máster en la Universidad de Boston. Una formación completa que puso en práctica junto a su padre ayudándole en la gestión del patrimonio empresarial de la Casa de Alba. Después de aprender el oficio, tal y como ha podido saber Vanitatis en primicia, el conde de Osorno ha creado su primera empresa enfocada a un sector que en su familia conocen bien.
Un proyecto 'familiar'
Según consta en la documentación del Registro Mercantil, a la que ha tenido acceso este medio, el conde de Osorno fundó en 2019 Amura Corp SL, una empresa dedicada “a la importación de productos alimenticios, bebidas y tabaco”, y más en concreto a la comercialización del aceite de oliva bajo la marca Magallanes Mediterranean Diet, que acaba de registrar.
Aunque aún no dispone de página web, desde Vanitatis hemos podido corroborar que se dedica a la venta y distribución de aceites y grasas comestibles, aceite de oliva, condimentados, aromatizados para cocinar, para uso alimenticio; y, por supuesto, aceite de oliva virgen extra, el oro líquido aclamado tanto dentro como fuera de nuestras fronteras.
Como administrador único, Carlos se encarga del día a día de esta compañía de la que pronto conoceremos sus primeros resultados económicos. Presentados el pasado mes de marzo, lo cierto es que aún no se han hecho públicas las cuentas, así que tendremos que esperar para saber si han sido favorables.
En la gestión no le faltará el consejo de su padre, experto en la explotación de productos procedentes de las fincas repartidas por toda la geografía española que, según se cuenta, equivalen a la superficie de la isla de Gomera. Los productos gourmet se comercializan bajo el nombre de Casa de Alba Fine Food y formaron parte de las exclusivas cestas que la madrina de la hija de los duques de Huéscar, Lady Aguacatte, puso a la venta en plena desescalada.
En este negocio, fundamentalmente basado en la venta online, también trabajó durante un tiempo Carlos ayudando a cumplir una de las últimas voluntades de su abuela Cayetana, a quien estaba profundamente unido como su hermano Fernando, con quien solo se lleva un año de edad.
Los otros negocios de Carlos
Esta, aunque es la más llamativa por ser su gran primer proyecto en solitario, no es su única participación oficial en el mundo de los negocios. Carlos participa en las explotaciones agrarias de los Alba, Euroexplotaciones Agrarias SA y Castrofresno SL, como administrador solidario (su padre es el presidente y accionista mayoritario de la primera y también administrador solidario de la segunda). Por otro lado, Mibor Inversiones era una sociedad inmobiliaria de sus padres, en la que tanto su madre como su hermano y él son administradores solidarios.
Carlos Fitz-James Stuart y Solís, además de conde de Osorno, se ha ganado a pulso esta temporada el título de novio del año. Hijo menor del duque de Alba y Matilde Solís, entonará bien alto el ‘sí, quiero’ este sábado, 22 de mayo, en los jardines del palacio de Liria en una boda que se convertirá en la más comentada desde el inicio de la pandemia. Hace mucho tiempo que no vivimos un enlace de esta magnitud y repercusión, y su protagonista, uno de los menos mediáticos de la Casa de Alba, nos suscita muchísima curiosidad.
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