Isabel Preysler, Carmen Martínez-Bordiú y 25 años del "son gentuza" que pudo acabar con su amistad

Aunque sus apariciones en la prensa son hoy mucho más escasas, Carmen Martínez-Bordiú e Isabel Preysler han sido dos indiscutibles reinas del corazón durante muchos años. Se podría decir que, aunque con orígenes muy diferentes, sus vidas han corrido en paralelo. La fama y sus relaciones sentimentales lograron acercarlas. Tanto, que acabaron siendo amigas inseparables.

Por coincidir, coinciden hasta en edad y casi en fecha de nacimiento. Ambas acaban de cumplir 71 años. Carmen lo hizo el 26 de febrero; Isabel, 8 días antes, el 18.

En 1971, Isabel Preysler protagonizó la que quizás fue la boda más comentada de la época. Se casó con Julio Iglesias. Un año más tarde fue Carmen Martínez-Bordiú la que contrajo matrimonio con Alfonso de Borbón Dampierre, primo de don Juan Carlos.

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P. Izquierdo

Tras las respectivas bodas, los dos matrimonios se convirtieron en vecinos del mismo edificio, ubicado en la calle de San Francisco de Sales de Madrid. Preysler y Martínez-Bordiú ya se conocían, pero fue en esta época cuando su amistad se fortaleció.

Damas de la alta sociedad, mediáticas, observadas por todos, vecinas… Eran muchos los puntos en común que las unían y por los que se podían comprender mutuamente. También debieron ser muchas las confidencias que compartieron la una con la otra en aquella época. La maternidad, esa nueva etapa en sus vidas que vivieron durante los mismos años, o sus alegrías y tristezas dentro del matrimonio, posiblemente fueron temas de conversación existentes entre ambas.

Siete años les duraron a las dos aquellos matrimonios. En los años siguientes, las dos volvieron a pronunciar el ‘sí, quiero’ en dos ocasiones. Carmen Martínez-Bordiú lo hizo con el anticuario Jean-Marie Rossi, en 1985, del que se divorció en 1995 para, 11 años después, volver a protagonizar otra boda, esta vez con el empresario José Campos, en 2006. Por su parte, Isabel Preysler se casó con Carlos Falcó en 1980. Se divorció de él en 1985 y tres años más tarde volvió a vestirse de novia, esta vez para unir su vida a la de Miguel Boyer.

Parecían destinadas, pues, a entenderse en un mundo que compartían de una manera muy similar. Pero en 1997, aquella amistad que parecía inquebrantable se tambaleó por culpa de un programa de televisión.

Este domingo 13 de marzo se cumplen 25 años de un momento histórico en el mundo televisivo. Aquel día de 1997 se emitía en Canal 9 el primer programa de ‘Tómbola’, un nuevo formato del periodismo del corazón en la pequeña pantalla que rompió moldes y que cambió para siempre la manera de informar sobre las vidas de personajes famosos.

En ‘Tómbola’, el halo de perfección con el que, hasta el momento, se solían presentar las vidas de los rostros conocidos en reportajes y entrevistas desapareció para mostrar la verdadera realidad de las mismas. Los famosos que acudían al programa lo hacían para someterse a duras críticas y para que aspectos poco amables de sus vidas fueran desvelados. Capitaneado por Ximo Rovira, ‘Tómbola’ contaba con un escuadrón de periodistas de la crónica social con afiladas lenguas. En aquel primer programa, Jesús Mariñas, Lydia Lozano, Paloma Barrientos, Karmele Marchante y Javier de Montini fueron los que sometieron a sus invitados a sus preguntas. Entre los famosos que acudieron a aquel ‘Tómbola’, se encontraban Sofía Mazagatos, Antonia del’Atte, Carmen Ordóñez, Marlène Mourreau, Jorge Juste y Carmen Martínez-Bordiú.

Pero aquel 13 de marzo, la invitada estrella iba a ser otra: Chábeli Iglesias, hija de Isabel Preysler, una de las mejores amigas de Carmen Martínez-Bordiú. Dispuesta a ofrecer una entrevista blanca y con poca sustancia, se encontró con el enfado de los periodistas, que esperaban más de ella. "Esta señora no hace nada. No trabaja”; “no nos interesa nada de lo que cuenta”; o “nos estamos riendo de ella" fueron algunas de las lindezas que le dedicaron a la hija de Julio Iglesias e Isabel Preysler que, cuando no pudo más con la presión, se levantó pronunciando una frase que aún hoy es recordada: “Me voy. Me da vergüenza tu programa y esta gente es gentuza”.

Mientras todo aquello ocurría, una Carmen Martínez-Bordiú petrificada era testigo directo de esta escena, en silencio, sin moverse ni pronunciar palabra, una actitud que Isabel Preysler no comprendió.

"No sabes cuántas veces me han dicho que lo de Chábeli estaba preparado, o bien que estábamos conchabados con ella o bien que había hablado con los periodistas para que forzaran su marcha del programa. Nada más lejos de la realidad. Cuando se produjo el momento y durante toda la noche tuvimos la sensación de que aquello perjudicaba a un formato que acababa de nacer. Al día siguiente y con las audiencias en la mano todo cambió. Pronto se recibieron peticiones para que el programa se emitiera también en Telemadrid, Canal Sur e incluso en países de Latinoamérica vía satélite", nos cuenta el presentador de 'Tómbola', Ximo Rovira.

Lydia Lozano asegura a este medio que no puede “olvidar ese momento de ‘Tómbola’. Chábeli fue nuestra musa. Gracias a ese programa con ella, estuvimos años en pantalla”. La periodista explica por qué nadie estuvo pendiente de la reacción de Carmen Martínez-Bordiú. “El momento fue tan increíble y tan impactante que nosotros no miramos al resto de los invitados que estaban en el plató. Solo mirábamos a Chábeli. Estábamos abducidos por el momento”. “No recuerdo haber hablado con Carmen en aquel momento. Luego sí que nos enteramos de que Isabel Preysler y Carmen Martínez-Bordiú eran íntimas amigas y que aquella le había reprochado a esta que no hubiese sacado la cara por su hija”, añade.

Paloma Barrientos comenta a Vanitatis que “efectivamente, este programa provocó el primer enfado entre Isabel Preysler y Carmen Martínez-Bordiú. Isabel consideraba que Carmen no había defendido a Chábeli como tenía que haberlo hecho”.

La periodista entiende la 'no reacción' de Martínez-Bordiú porque asegura que “lo cierto es que ninguno de los que estábamos allí imaginábamos que el programa iba a terminar de aquella manera, con Chábeli marchándose del plató y llamándonos 'gentuza'”.

Lydia Lozano cree que “Carmen se quedó bloqueada. Yo comprendo que Isabel le reprochara que con las tablas que tenía en los platós, no defendiera a Chábeli, pero también hay que entender que para los invitados era un programa nuevo, que no se sabía de qué iba ni lo que podía ocurrir en él”.

El hecho de que no fuese un programa aún rodado, también es algo que resalta Ximo Rovira: "Era el primer programa para todos e íbamos improvisando bastante sobre la marcha. Si hubiera ocurrido con el programa más rodado, seguramente Carmen hubiera reaccionado de otra forma".

El presentador de 'Tómbola' también cree que Carmen Martínez-Bordiú sufrió un bloqueo: "Se puede ver en el programa que en ningún momento hace intento de mediar con los periodistas en algunas preguntas o comentarios que incomodaban visiblemente a Chábeli, tal vez porque pensara que no le correspondía ese papel durante el programa pero aunque lo hubiera pensado, a todos nos extrañó su pasividad. Yo diría que el hecho de que viniera Carmen al mismo programa que Chábeli no fue premeditado o buscado para generar polémica. Creo que fue casual. No recuerdo que ningún periodista hiciera alusión a la amistad de Carmen con Isabel Presyler durante la entrevista o posteriormente, ya que hubiera sido un hilo del que tirar una vez que Chábeli se marchó. Yo tuve constancia semanas más tarde, cuando se comentó en el programa o se publicó que la amistad entre Isabel y Carmen se había deteriorado a raíz de la falta de implicación de la Bordiú en la entrevista de Chábeli".

Añade que "resulta extraño que no saliera en defensa de la hija de su amiga en el plató. Puede que se quedara bloqueada o que pensara que aquello no tendría la repercusión que posteriormente tuvo, o que simplemente viera cómo era patente que más allá de que algunas preguntas eran incisivas y hasta faltonas, Chábeli no supo manejar la situación. Tal vez pensara que Chábeli se estaba equivocando al no querer contestar las preguntas y no quiso intervenir, quizás pensando que ya era mayorcita para defenderse sola".

Paloma Barrientos no solo fue una de las periodistas presentes en aquel ‘Tómbola’. También es una gran conocedora de la figura y la vida de Martínez-Bordiú como autora de la biografía ‘Carmen Martínez-Bordiú: a mi manera’ (Ediciones B). Nos explica que “Isabel Preysler y Carmen Martínez-Bordiú estuvieron bastante tiempo sin hablarse. Sí sé que, después de aquello, Carmen llamó en varias ocasiones a Isabel y que le mandó unas cartas para explicar lo sucedido”.

Parece que los intentos de reconciliación de Martínez-Bordiú y el paso del tiempo, que logra que todo se aprecie en perspectiva y con más frialdad, consiguieron calmar las aguas. Dos años, se ha llegado a asegurar, que duró el enfado de Preysler con Martínez-Bordiú. Aunque parece que el cariño que ambas sentían por la otra y los años de amistad pesaron y finalmente retomaron su relación hasta hoy.