François Hollande, expresidente francés, y la actriz Julie Gayet se casan en secreto

Sus comienzos no fueron fáciles, pero pudieron superar todos los obstáculos que tuvieron en contra, que no fueron pocos. La boda de François Hollande y Julie Gayet, que se han casado este fin de semana en secreto, ha puesto la guinda a una historia de amor que dura ya nueve años -al menos de forma oficial- y que no ha estado exenta de polémicas, afectando incluso muy negativamente a la carrera política de él. Pero, por fin, el expresidente de la República francesa y la actriz se han dado el 'sí, quiero', respondiendo así a los que, en su momento, no apostaban por esta relación.

La pareja se casaba el pasado 4 de junio en la localidad francesa de Tulle, convirtiéndose en una más de las bodas que hemos tenido este fin de semana, aunque mucho más secreta. Un día antes, ella soplaba las velas de su 50 cumpleaños y, en las palabras que compartía en redes sociales para agradecer las felicitaciones, nada hacía pensar que solo 24 horas después cambiaría su estado civil. Al enlace asistieron los dos hijos que ella tuvo con el director argentino Santiago Amigorena, expareja a su vez de la actriz Juliette Binoche. También los cuatro hijos que Hollande tuvo con Ségolène Royal, igualmente política y con la que tuvo una relación de varias décadas, aunque nunca llegaron a casarse.

Ha sido el propio alcalde de Tulle, Bernard Combes, el que informó a los medios de comunicación del enlace, que él mismo ofició, no solo por ser el edil de la localidad, sino también porque es amigo cercano de François Hollande, a quien sucedió al frente del ayuntamiento. Fue una boda íntima, con muy pocos invitados y un ambiente relajado que se reflejó en el atuendo de una de las invitadas. La periodista francesa Emilie Broussouloux, pareja de Thomas Hollande, uno de los hijos del novio, lucía un dos piezas de estilo boho y estampado floral que compartió a través de sus redes sociales.

De las celebraciones de la pareja tras el 'sí, quiero' poco se ha sabido, aunque algunos medios franceses dan por hecho que se trató de una reunión tranquila en la casa que ambos comparten en Tulle, donde tuvo lugar el enlace. Hijos, algunos familiares y también compañeros de trabajo de Julie Gayet, como el cantante Benjamin Biolay, con el que compartía gira en 2021. No hay duda de que ha sido una semana redonda para la actriz, que además de convertirse en mujer casada ha cumplido los 50 y ha estrenado la segunda temporada de la serie de Netflix 'Una madre perfecta'.

Su historia de amor

Como decíamos, aunque la boda de François Hollande y Julie Gayet ha supuesto el broche de oro a su historia de amor, sus comienzos no fueron precisamente fáciles. Fue en 2014 cuando se empezó a rumorear que podría haber una relación entre ellos, en un momento en el que la popularidad de él, aún en el Palacio del Elíseo y en una relación con Valerie Trierweiler, estaba bajo mínimos. Fue la revista 'Closer' la que publicó las primeras fotos de la pareja, con el consiguiente escándalo y amenazas de demanda de uno y otro por intromisión en su intimidad, aunque nunca desmintieron el romance.

En 2016 se habló de una posible ruptura que ellos prefirieron no abordar. Las visitas de Julie al Elíseo, residencia oficial del presidente de la República francesa, se habían ido espaciando, por lo que muchos medios dieron por hecho que la relación entre ellos había terminado. La pareja aprovechó la circunstancia para que las aguas se calmaran, ya que el romance no había dejado de dar que hablar, y generalmente para mal. No fue hasta que Hollande abandonó la presidencia del país cuando la actriz admitió que la relación seguía adelante.

"No sé lo que hay en su cabeza, pero lo que sí sé es que es una directora, productora y actriz. La veo interpretar, producir, interesarse por todos los espectáculos y todas las artes. Pienso que es ella quien debe hablar de sí misma y yo la veo hacer, interpretar y ser", decía.. "Ella quería y yo lo he entendido perfectamente, después de 20 años de ausencia en el teatro, volver a la escena, pero no a la escena mediática, que ya lo ha estado suficientemente, sino a la escena teatral, que es su pasión. Este ha sido su desafío, ser capaz después de un largo silencio, mostrar emoción y convicción en una obra que es muy bella", manifestaba el político.