El gran negocio inmobiliario de Iker Casillas con su piso en Madrid

Eran los tiempos en los que Iker Casillas ponía punto y final a su accidentada etapa como guardameta en Oporto, cuando sufrió el infarto que terminó con su brillante carrera deportiva. El exfutbolista regresaba a Madrid con su entonces esposa Sara Carbonero y sus hijos y, antes de que su matrimonio se viniera abajo, decidía realizar una importante inversión: adquirir una espectacular vivienda en Pintor Rosales, frente al Templo de Debod, una de las zonas más lujosas de la capital.

Esta zona residencial muy tranquila, al lado del parque del Oeste, donde residen otros famosos como Rosario, Pedro Almodóvar o Genoveva Casanova, fue el lugar elegido por Casillas para desembolsar un millón y medio de euros a cambio de un piso de casi 300 m2, en una finca con pocos vecinos y que decidía entonces reformar por completo.

Pero ahora, según informa 'El Español', el ex del Real Madrid se ha desprendido de la propiedad -que tiene terraza, dos patios y dos cuartos trasteros– y lo ha hecho obteniendo además un suculento beneficio, ya que la venta se ha cerrado en tres millones de euros. Descontando lo que invirtió en renovar la vivienda, se calcula que en solo dos años se habría embolsado un millón de euros netos.

El citado medio añade que el comprador ha sido un empresario de Elda, Carlos Martínez, que tiene 49 años y es presidente y fundador de la institución educativa IMF Business School. La compra se hacía efectiva a través de una sociedad el pasado mes de enero, pero no ha trascendido hasta ahora.

Por su parte, Iker, tras su separación de Sara Carbonero, se mudaba a un ático de lujo en la exclusiva urbanización La Finca de Pozuelo, situado junto a un campo de golf y muy cercano al chalé donde la periodista manchega vive con sus hijos. Esta casa unifamiliar la adquiría la pareja en 2014 por dos millones y medio de euros. Un hogar con más de 1.000 m², 6 dormitorios, 7 baños, spa, gimnasio y una piscina interior climatizada, entre otros detalles.

Además de sus varias inversiones inmobiliarias, el que fuera portero de la selección española también ha probado fortuna en otros sectores. Así, hace unos meses anunciaba que había invertido en una startup tecnológica para la prevención de riesgos coronarios.

El que fuera también candidato a presidir la Federación Española de Fútbol quiso contribuir con su inversión en Idoven, una startup española, como él mismo desvelaba: "Después de varias conversaciones, tuve claro que quería apoyar y formar parte de este proyecto".

Iker Casillas subrayó entonces que "todos los deportistas, sin importar el nivel, estamos expuestos a sufrir lesiones y problemas médicos, incluyendo problemas cardiacos. Estoy convencido de que aportar mi granito de arena ayudando al tejido empresarial español y, en concreto, a la salud y el deporte es un valor seguro".