Así es Elisabeth Garrido, la mujer del diestro Morante de la Puebla

Además del Real hay otros escenarios donde se vive la Feria de Abril con mucha intensidad, como es la plaza de toros de la Maestranza. Cada tarde, los tendidos y el callejón se llenan de caras conocidas de la capital sevillana y del mundo taurino.

Una de las citas más esperadas ha sido la corrida de José Antonio Morante de la Puebla con Diego Urdiales y Juan Ortega. En ella, el torero de la ribera del Guadalquivir, como le nombran los sevillanos, logró el primer rabo concedido a un matador en la Maestranza después de 50 años. Un hito sublime para los taurinos. Morante salió por la Puerta del Príncipe y fue paseado a hombros de los aficionados por las calles de la capital andaluza.

Este alborozo fue compartido Elisabeth Garrido, su segunda esposa, que se encontraba en el coso. Es de las pocas mujeres de torero que acompaña a su marido y contempla en directo las corridas.

Siempre discreta, esta paisana de La Puebla del Río (Sevilla), lugar al que el diestro debe la mitad de su nombre, es su compañera desde hace 13 años; se conocían desde que eran niños. Se casaron el 2 de noviembre de 2010 después de apenas un año de noviazgo.

La ceremonia civil se celebró en la Hacienda Los Ángeles, en la localidad sevillana de Alcalá de Guadaíra. Con 150 invitados no fue tan multitudinaria como la primera boda del torero, ni esa vez hubo traje corto ni calesa. Entre los 150 invitados, hubo algunos rostros conocidos como Curro Vázquez, con su mujer, y Luis Antonio Gaspar (Paulita).

Morante de la Puebla ya había pasado por el altar en 2005 con la que fue su novia de toda la vida, Cynthia Antúnez, y de la que se separó en 2008, tras enfrentarse a una severa depresión que provocó incluso que se retirara del toreo temporalmente.

Morante y su actual esposa viven en su pueblo natal. Son propietarios de un conocido bar de copas, La Capilla, al que acuden grupos de amigos y aficionados al toro, que a veces son recibidos por el propio diestro detrás de la barra. La pareja tiene dos hijas: María, de 12 años, y Lola, de 10. A la familia se suma José Antonio, de 16 años, el hijo que Morante tuvo con Cynthia Antúnez.

La familia reside en la Huerta de San Antonio, una finca que el diestro tiene acondicionada con instalaciones deportivas, como un campo de fútbol, además de un espectacular caserío y de una plaza de tienta. Esta hacienda sufrió un incendio en 2019. Ocurría después de que aparecieran unas pintadas destinadas al torero, que había mostrado sus simpatías al partido político Vox.

Cuando Morante y su mujer quieren descansar y alejarse de La Puebla, se refugian en el chalé que le compraron a Vicky Martín Berrocal, amiga y admiradora del diestro, en la localidad de Matalascañas (Huelva), ubicado en primera línea de playa.

Amiga de Rosario Domecq, esposa de Julián López, el Juli, Elisabeth Garrido no pasa desapercibida en los distintos eventos de alta sociedad sevillana. Elegante, destaca por sus estilismos, siempre aplaudidos y a los que no les falta el toque flamenco. Conoce bien el ambiente taurino ya que, al igual que Morante de la Puebla, ha nacido en un lugar de gran tradición ganadera y cuna de grandes toreros. Además, su marido está considerado unos de los miembros del llamado G10 del toreo, encabezado precisamente por el Juli.

Discreta, no conocemos sus aficiones, pero coincidirá en algunos gustos con el matador, amante del fútbol y un bético confeso, que no antisevillista, como ha dicho. Además, Morante pinta de forma autodidacta, colecciona antigüedades, y ha confesado que le gusta el boxeo, deporte que le recuerda al toreo, y las peleas de gallos. Los dos destacan por su originalidad en la forma de vestir, ya que es habitual ver al diestro fuera de los ruedos con una estética singular y con un toque bohemio.