El truco de Manuela Carmena para tener contentos a sus concejales
La alcaldesa de Madrid comparte magdalenas e inglesitos con todos los miembros del arco político del consistorio para fomentar que la corporación municipal se conozca
Manuela Carmena lleva a las reuniones del Ayuntamiento de Madrid magdalenas e ‘inglesitos’ que prepara en casa. Y las comparte con toda la corporación –oposición incluida– que por ahora no pone peros a esta iniciativa tan peculiar de la actual cabeza visible de la Capital del Reino. Y por lo que contó en el transcurso de una comida en el restaurante Casa María que compartió con un grupo de periodistas (y donde hubo cocido) son "una receta casera de toda la vida y cuyo 'secreto' para triunfar reside en que el relleno sea de calidad". De hecho, tuvo que explicar a los más profanos en qué consistía la receta. No todo los presentes estaban al tanto de esta 'delicatessen' que forma parte de las meriendas de las casas del madrileño barrio de Salamanca o similares.
"Los inglesitos son mediasnoches con forma redonda rellenos de lechuga, tomate y jamón de york. No es nada del otro mundo pero a mí me gusta llevarlos. Sirven para hacer un alto en las reuniones e 'invitan' a que la corporación se conozca”, explicó Carmena en el almuerzo organizado por Maril Zaera, dueña de MZ Comunicación. Además de la cuestión culinaria, la alcaldesa no rehuyó ningún tema polémico e incluso reconoció que "Ana Botella ha hecho cosas bien" y que no sería ella "quien niegue el pan y la sal" a sus predecesores.
Por otra parte, quiso aclarar que algunas de sus propuestas más sorprendentes. Como la tan traída y llevada limpieza de las calles a manos de los universitarios. "Aquello se sacó de contexto", argumentó, y confirmó que la iniciativa de repartir ceniceros en Madrid estaba ya en marcha. "Desconozco si serán gratuitos o mediante el pago de una cantidad simbólica".
Jovial y dicharachera, Carmena aseguró que su vida privada no se ha resentido demasiado: "Sigo haciendo las mismas cosas que antes; aunque ahora con mucho menos tiempo, inclusive con mi marido, con quien la situación no ha cambiado en absoluto". Quizá lo que peor lleva son las críticas a su entorno más cercano y las acusaciones de nepotismo por fichar a Luis Cueto, marido de su sobrina, quién también disfrutó del cocido. Según informó Ivan Gil en 'El Confidencial' "hay quien se refiere al funcionario como 'alcalde en la sombra' de Madrid". Un hecho que puso de manifiesto durante la comida; pues era él quien repartía juego entre los periodistas.
Cumbre de políticos y 'socialites'
Carmena ha sido el segundo personaje político, después de Antonio Miguel Carmona, en compartir con la prensa un menú a base de cocido 'rebautizado' como “los garbanzos de Marile”. La idea era rememorar aquellas famosísimas ‘Lentejas de Mona Jiménez’ que congregaba en los años 80 a políticos, empresarios e intelectuales alrededor de un plato de legumbres. Esas reuniones se convirtieron en un verdadero filón para las relaciones tanto políticas como afectivas. En una de ellas fue donde surgió el flechazo entre Miguel Boyer e Isabel Preysler. Nunca se hubieran encontrado al ser sus mundos tan diferentes si no hubiera sido por la curiosidad de Preysler que pidió a su amiga que la dejara estar en uno de esos almuerzos.
Manuela Carmena lleva a las reuniones del Ayuntamiento de Madrid magdalenas e ‘inglesitos’ que prepara en casa. Y las comparte con toda la corporación –oposición incluida– que por ahora no pone peros a esta iniciativa tan peculiar de la actual cabeza visible de la Capital del Reino. Y por lo que contó en el transcurso de una comida en el restaurante Casa María que compartió con un grupo de periodistas (y donde hubo cocido) son "una receta casera de toda la vida y cuyo 'secreto' para triunfar reside en que el relleno sea de calidad". De hecho, tuvo que explicar a los más profanos en qué consistía la receta. No todo los presentes estaban al tanto de esta 'delicatessen' que forma parte de las meriendas de las casas del madrileño barrio de Salamanca o similares.