Invitaciones de boda: coste medio, importancia y claves
Las invitaciones son uno de los preparativos que menos se tienen en cuenta en una boda, pero desempeñan una función esencial. Te damos todas las claves
Las invitaciones son unos de los elementos más importantes de una boda lejos de lo que pueda parecer. Lo cierto es que son muchas las parejas que a penas les dan importancia, ni dedican el tiempo suficiente a pensar en su diseño, buscar empresas que las realicen... porque consideran que, de todos los preparativos que tienen por delante, este es uno de los menos relevantes. En contraposición, podemos afirmar que las invitaciones son la carta de presentación del que será el evento de sus vidas.
En estas, además de informar a los asistentes de cuestiones básicas como la fecha, la hora o el lugar en el que se llevará a cabo el enlace, se desvelan algunas pistas como la estética que tendrá la boda, la paleta cromática que han elegido los novios, la temática (si la hay) etc. Por esta razón, cualquier pareja que vaya a darse el "sí, quiero" debería resolver cuestiones como dónde hacer las invitaciones, qué presupuesto dedicarles o qué texto escribir, con suficientes meses de antelación.
Tipos de invitaciones
Lo primero que debéis de definir es el tipo de invitación de boda que queréis. Las opciones son tantas como vosotros mismos podéis llegar a imaginar y es que se puede hacer prácticamente cualquier cosa en ellas; lo ideal, como con prácticamente todos los aspectos que rodean a un enlace, es optar por una forma, diseño o texto que, además de cumplir con su función básica informativa, refleje el estilo y personalidad de los novios y encaje perfectamente con sus gustos y preferencias.
En este sentido, encontramos invitaciones minimalistas, basadas en la naturaleza, inspiradas en series o películas, con textos divertidos... Sin embargo, no solo debemos pensar en el formato físico en papel, también existe la opción de hacer un diseño que se envíe por email o WhatsApp, mucho más ecológico e, incluso, hay quienes hacen de su invitación de boda un auténtico acontecimiento aparte, creando una página web o una sección especial en sus redes sociales, donde informar de todo lo que rodea al gran día.
¿Dónde hacerlas?
Solo hay que teclear "invitaciones de boda" en Google para que nos ofrezca más de 47.000.000 resultados en lo que a empresas y páginas web para crear invitaciones se refiere. En este sentido tienes dos opciones, dirigirte a una empresa especializada en diseño gráfico nupcial, cuya profesionalidad pueda aportar un plus a toda la cartelería de tu enlace (desde las invitaciones al seating plan), realizando exactamente lo que tú le comuniques o hacer tu mismo/a el diseño mediante una página web.
Si bien es cierto que muchas páginas de diseño ofrecen plantillas e interfaces sencillas para que podáis realizar vosotros mismos las invitaciones (y de paso, ahorrar costes), nada podrá reemplazar la profesionalidad de una empresa especializada que, probablemente, te ofrecerá un pack por el cual consigas, además de la invitación, otros elementos como la versión digital. Si cuentas con weading planner, no dudes en comunicarle lo que te gustaría y seguro, lo hará realidad por difícil que sea.
Coste medio
En relación con lo anterior, el coste de las invitaciones de boda ha cambiado mucho, puesto que, cada vez son más los novios eco-friendly que optan por prescindir del papel y enviar una versión digital (e incluso un mensaje informal) y también los hay que prefieren ahorrar presupuesto en esto, y se decantan por crearlas ellos mismos con el único coste de imprimirlas en una copistería. Sin embargo, podríamos establecer una cifra media a partir de los invitados medios, lo que suelen costar las bodas...
Según hemos podido comprobar en distintas empresas dedicadas a la realización de invitaciones de boda el coste medio por unidad se sitúa de los 0,50 céntimos a los 3 euros, en función del tipo de papel, personalización, tinta etc. Si tenemos en cuenta que, en España, el número de invitados medio por boda es de 150, hablaríamos de 200-250 euros de gasto en invitaciones, mucho menos si optamos por el 'Do it yourself' ('Házlo tú mismo'). En definitiva, una de las partidas más bajas de todo el presupuesto en general por lo que, tratar de ahorrar en este aspecto, es, en muchos casos, un gran error.
¿Cuándo mandarlas?
Una de las dudas más frecuentes en lo que respecta a las invitaciones es cuándo enviarlas. Hay quienes por la ilusión que tienen de compartir la gran noticia, la dan con tanta antelación que, incluso, a los invitados les cuesta encontrarla cuando llega por fin el evento y otros, apuran tanto que muchos de sus amigos pueden darse por no invitados y hacer planes ese día que no puedan cancelar. La fecha ideal se sitúa en torno a los 3 meses de antelación y, como mucho, hasta 1 mes y medio antes.
Un recurso por el que están optando muchos novios en los últimos tiempos es el llamado 'save the date' que no es otra cosa que una especie de invitación, pero mucha más pequeña, sin a penas detalles, en la que solo queda reflejada la fecha de la boda y se da en el mismo momento que se anuncia la gran noticia para que los invitados reserven la fecha. Suele entrar dentro de los packs de papelería nupcial, pero para esto, hay que contratarlo, incluso antes de tener elegido el lugar o la propia fecha.
¿Qué escribir en ellas?
El texto es una de las partes fundamentales de una invitación de boda y para escribirlo hay que dejarse guiar por varios factores: tiene que ir en línea con la estética de la invitación en cuestión, de tal manera que, si por ejemplo está inspirada en una película se haga alguna referencia a la misma; debe contener la información básica: fecha, lugar hora y, en algunos casos, número de cuenta para los regalos; es importante la distribución que tenga el texto dentro del papel en función de su importancia.
Además, nunca es demasiado incluir un mapa del lugar, algunos detalles de lo que se van a poder encontrar en la fiesta, teléfonos de contacto de algún familiar o amigo cercanos por si quieren preparar alguna sorpresa a los novios y, por supuesto, un sello personal que deje patente la personalidad de los protagonistas.
Las invitaciones son unos de los elementos más importantes de una boda lejos de lo que pueda parecer. Lo cierto es que son muchas las parejas que a penas les dan importancia, ni dedican el tiempo suficiente a pensar en su diseño, buscar empresas que las realicen... porque consideran que, de todos los preparativos que tienen por delante, este es uno de los menos relevantes. En contraposición, podemos afirmar que las invitaciones son la carta de presentación del que será el evento de sus vidas.