7 cambios que se producen en nuestro cuerpo cuando nos enamoramos
Cada vez que uno se enamora, nuestro cuerpo se pone en marcha y comienza a comportarse de manera diferente y aunque el amor esté representado por el corazón, es una cuestión más de mente
Aunque el amor esté mitificado en muchos aspectos de la cultura, en realidad todas las experiencias emocionales por las que pasa el cuerpo, desde un enfado hasta enamorarse perdidamente de alguien, están dominadas por la química de nuestro organismo.
Por ello, cuando empiezas a amar a alguien, muchos mecanismos se ponen en marcha en tu cuerpo y la mente comienza a liberar sustancias químicas, que son las responsables de los síntomas del enamoramiento. Para que conozcas más lo que ocurre en tu cuerpo cuando te sientes así por alguien, aquí tienes siete cambios que se producen en tu interior.
Tu corazón se acelera
Si antes de una cita o de verte con la persona que quieres, sientes que se te sale el corazón, es porque el cerebro estimula la aparición de adrenalina y noradrenalina. Estas dos hormonas son secretadas por la glándula suprarrenal a la circulación sanguínea, y por ello, el corazón se acelera, nuestras mejillas se ruborizan y nuestras manos transpiran.
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Te sentirás eufórico
Otra de las sustancias que libera nuestra mente cuando nos encontramos con nuestro enamorado, son las hormonas de la felicidad, es decir, la serotonina, las endorfinas y la dopamina. Son tres sustancias que influyen en el estado de ánimo y que, durante el enamoramiento, aumentan sus niveles hasta provocarnos sensaciones de extrema felicidad.
Tu piel estará más joven
Durante la etapa de enamoramiento, los estrógenos también se elevan y esto, tiene un efecto muy positivo en la piel. Los altos niveles de esta sustancia, consigue que la piel esté más firme, más elástica y más brillante. Por eso, no es de extrañar que se diga que cuando estamos enamorados, se nota en la cara, porque literalmente ocurre así. La explicación científica está en que los estrógenos contienen colágeno, elástica y ácido hialurónico, que ayudan de manera muy positiva a la piel.
Pelo y uñas más fuertes
El culpable de estos síntomas también son los estrógenos. Se debe a que la hormona produce una hidratación adicional en estas zonas del cuerpo y por ello, tanto el pelo como las uñas, crecen con más resistencia. Por ello, cuando se llega a la menopausia o cuando se ha tenido un parto, el cabello puede volverse fino, quebradizo y seco, pues, en estas situaciones los niveles estrogénicos han caído.
Nuestro cerebro cambia
En un estudio publicado para la revista Frontiers of Human, unos científicos han descubierto que el amor es capaz de cambiar nuestro cerebro. En la publicación, demuestran que al menos diez áreas del órgano modifican su actividad al enamorarnos. Las áreas que se ven afectadas están relacionadas con la motivación, la recompensa y las aptitudes emocionales, que se ven estimuladas.
Puedes sentirte adicto
Antes hablamos de las hormonas de la felicidad y una de ellas, la dopamina, es el neurotransmisor responsable del placer. Se libera al enamorarse, pero también puede generar con cosas negativas como la consumición de drogas. Los efectos de la dopamina producen esa sensación de euforia que comentábamos antes, pero cuando estos desaparecen, dan lugar a un malestar parecido al mono. Por eso, cuando tu enamorado no te escribe, puedes sentir esa ansiedad y malestar.
Amor y apego
La oxitocina es conocida popularmente como la hormona del amor, ayuda a estrechar lazos emocionales y a experimentar apego. Una de las cosas que puede hacer que esta hormona se libere es el contacto físico que hay durante el amor. Debido a esta hormona, nuestro cuerpo desarrolla lazos de confianza con la persona de la que está enamorada, pues, su contacto, nos hace felices a nivel químico.
Como puedes comprobar, enamorarse produce una verdadera revolución dentro de nuestro cuerpo, pero, en general, suele traer cosas buenas y hacer que las cosas parezcan de otros colores más brillantes y todo, por una cuestión de química.
Aunque el amor esté mitificado en muchos aspectos de la cultura, en realidad todas las experiencias emocionales por las que pasa el cuerpo, desde un enfado hasta enamorarse perdidamente de alguien, están dominadas por la química de nuestro organismo.