El príncipe Harry y Cressida, del altar a la posible ruptura en un tiempo récord

Tras varias semanas de rumores sobre una nueva boda en Buckingham Palace entre el príncipe Harry y Cressida Bonas,varios medios aseguran que su ruptura es ya un hecho.

La revista People ha sido la primera publicación que ha anunciado su separación. “Él estaba empezando a encontrarla demasiado exigente y lo suyo no funcionaba”, aseguran. Sin embargo, varios han sido los medios que han ido dando más información en las últimas horas sobre una ruptura que desde la familia real británica prefieren no comentar. “Sí, están separados. Tuvieron una crisis y rompieron. Harry es el tipo de chicos que quiere tener su espacio y volver a intentarlo en un tiempo”, publicó este lunes Us Weekly.

A pesar de que en Estados Unidos dan por hecho el fin de su romance, en Gran Bretaña, la noticia ha sido acogida con cierto recelo, perovarios han sido los amigos de la pareja que, desde el anonimato, lo han confirmado. “Es imposible que una relación funcione cuando se está en el punto de mira del público a todas horas. Han roto y sólo el tiempo dirá si se darán una segunda oportunidad. Ni ellos mismos lo saben”, recoge The Telegraph. Otra fuente cercana apunta que “la separación ha sido amistosa” y que la juventud de Cressida Bonas, de 25 años, podría haber sido uno de los motivos de la decisión, ya que no estaba preparada para afrontar la presión mediática.

Eugenia de York, una alcahueta 'royal'

El príncipe Harry y Cressida comenzaron a salir en mayo de 2012 gracias a la intermediación de la princesa Eugenia, prima de Harry e hija de Sara Ferguson. Poco después de esa fecha, el nieto de Isabel II protagonizó uno de los mayores escándalos de la monarquía británica durante unas vacaciones en Las Vegas. Ebrio y en compañía de una chica que no era su novia, Harry fue fotografiado completamente desnudo. Aquella imagen, que fue publicadapor decenas de medios internacionales, entre ellos varios británicos, como The Sun, que se atrevió a publicarla ante las advertencias de la familia real acerca de que si lo hacía estaba cometiendo “una auténtica violación de la intimidad del príncipe”.

Sin embargo, el verdadero cambio en la relación entre ellos ocurrió el pasado mes de marzo. Siempre discretos, la pareja se dejó ver dos veces en sólo tres días, algo que no sorprendería si ambos no ocultaran un romance que era aceptado, incluso, por la casa real británica. Alérgico a ser fotografiados por los medios de comunicación, el pasado 7 de marzo fue la primera ocasión en la que ninguno de ellos se escondió de las cámaras aún sabiendo que las habría en un acto benéfico en el Wembley Arena. Sólo un día después, y muy acaramelados, acudieron a un torneo de rugby. Desde entonces, los rumores de boda no han parado de sonar y los medios británicos han hablado de la existencia de una “cumbre” para organizar el compromiso del príncipe Harry y Cressida y de una cena privada ofrecida en el palacio de St. James en la que ella hizo de anfitriona.

La última vez que se tiene constancia de su relación fue a mediados del pasado mes cuando viajaron junto a unos amigos a Kazajistán, un viaje que puso contra las cuerdas a la familia real británica por haber elegido un país con una dictadura encubierta.