La cazadora de Prada del rey Juan Carlos, subastada por 5.000 euros

En septiembre, don Juan Carlos acudió a Sanxenxo (Pontevedra) para participar en la regata que lleva su nombre. Esa semana ya confirmó su presencia en la cena benéfica que organiza todos los años la Asociación Española Contra el Cáncer de dicha localidad. Como lo dijo, lo hizo. Solo había que adecuar su agenda y convencer a la infanta Elena para que le acompañara.

No hubo problema en el caso de la hija, que siempre está dispuesta para lo que mande el patrón. Así llaman los tres hijos a su padre, como descubrió el entonces príncipe Felipe al dirigirse de esa manera al Rey en su 70 cumpleaños. En cuanto a la agenda oficial, no resultó complicado porque cada vez tiene menos contenido institucional y el privado no es público.

Mely Rodríguez Luna, Carmina Marcos Alonso (presidenta y secretaria de la Junta Local de AECC, respectivamente) y el resto del equipo se pusieron manos a la obra para organizar el acto, con subasta y rifa en la que este año participarían activamente el Rey y la duquesa de Lugo. El viernes 19 de octubre todo estaba listo para el recibimiento en el Club Náutico que preside Pedro Campos, amigo y compañero de navegación de don Juan Carlos.

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Tanto el padre como la hija cedieron para la subasta sus cazadoras de regatas de la firma Prada previamente rubricadas por ellos. El monarca emérito añadió al lote una botella de vino reserva de 2010 embotellada exclusivamente para la Casa Real.

La expectación era grande, igual que la cifra alcanzada por las dos prendas: en el caso de la vestimenta que utilizó el monarca emérito fue de 5.189 euros, mientras que la de la infanta Elena llegó a los 3.250 euros. La relación con la firma italiana vino por Patrizio Bertelli, marido de Miuccia Prada, que comparte su afición marinera con don Juan Carlos.

Al encuentro solidario acudieron doscientas setenta personas, que compartieron fiesta con el Rey, su hija, el vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda; el alcalde de Sanxenxo, Telmo Martín; la expresidenta del Parlamento de Galicia Pilar Rojo y la campeona olímpica Tamara Echegoyen. Después del saludo oficial, invitados y autoridades se sentaron a cenar.

El menú consistió en aperitivos con jamón (cedido por la firma Joselito), merluza y postre. A continuación, la rifa donde la infanta Elena probó suerte y le tocó una cesta de Navidad (cedida por el supermercado Froiz), que tuvieron que llevar entre varias personas dado el peso de los productos. La primogénita Borbón quiso que se volviera a sortear.