Meghan Markle se 'retira': su agenda ya está en blanco para el nacimiento de su hijo

Comienza la cuenta atrás para uno de los acontecimientos más esperados del año en Reino Unido. Kensington se prepara para el nacimiento del nuevo miembro de la familia y la futura mamá, Meghan Markle, ya se encuentra descansando de todas sus actividades, con la agenda totalmente en blanco. Y sus actividades oficiales no han podido terminar de mejor forma, ya que la duquesa de Sussex echó el resto para celebrar este lunes el Día de la Commonwealth, con la visita a la Canada House por la mañana y la misa en la abadía de Westminster por la tarde, protagonizando una esperada imagen con su cuñada, Kate Middleton.

Así pues, la esperada fotografía de la reconciliación será muy probablemente la última imagen que tengamos de Meghan Markle antes de verla con su bebé en brazos, ya que este miércoles tenía otro compromiso, aunque no se anunciaba previamente por parte de Kensington. La esposa del príncipe Harry mantuvo una reunión privada con Lisa Burger y Rufus Norris, directora ejecutiva y director artístico del Royal National Theatre, del que la duquesa de Sussex es patrona. Al parecer, la intención es que mantenga reuniones con los responsables de algunas organizaciones que patrocina antes de retirarse de la actividad definitivamente, que serán encuentros privados de los que no habrá fotos.

Aunque el nacimiento se espera para abril, es posible que tengamos la esperada imagen del príncipe Harry y Meghan Markle con su hijo en brazos antes de lo que pensamos. Varias han sido las pistas que así lo indican. Ella misma, durante la recepción en Buckingham por el 50 aniversario de la investidura de Carlos como príncipe de Gales, afirmó en una conversación que estaban "ya casi". Además la exactriz ya ha sufrido algunas contracciones, además de las habituales de Braxton Hicks. Incluso, una fuente de Kensington ha apuntado que hace un par de semanas, la pareja tuvo que salir de urgencia al hospital pensando que el parto era inminente. Afortunadamente, no era así y Meghan ha podido hacer frente tanto a los compromisos oficiales previstos en su agenda, como a los que no se sabían y han sido toda una sorpresa, como su aparición en el WE Day junto a Harry.

Además de ofrecernos la fotografía más esperada de los duques de Sussex tras su boda, el nacimiento de su primer hijo desvelará también los grandes secretos de los que tanto se ha hablado estos meses y que han sido incluso objeto de apuestas en las casa de juego: el día del nacimiento, el sexo del bebé -del que se especula que puede ser niña- y, sobre todo, el nombre, para el que suena fuerte el de Diana, como gran homenaje a la princesa de Gales.