Adiós a la 'nonna': la madre de Meghan Markle vuelve a Los Ángeles
Doria Ragland ha retomado su rutina en Estados Unidos, después de estar un mes instalada en Frogmore Cottage junto a los duques de Sussex
Parece que finalmente Doria Ragland no se muda al Reino Unido. Ni siquiera va a estar varios meses junto a su hija, tal y como aseguraban algunos medios británicos unos meses antes de que Meghan Markle se convirtiera en mamá. Exactamente cuatro semanas es el tiempo durante el que la suegra del príncipe Harry se ha instalado en Frogmore Cottage para esperar la llegada de su primer nieto y ayudar a la pareja en sus primeros días como felices papás. Así, con su vuelta a casa demuestra que su hija no tenía intención de que se mudara al Reino Unido tras el nacimiento del niño, una noticia que fue muy criticada por los detractores de Meghan, por el posible gasto que podría ocasionar en las cuentas públicas.
Doria Ragland llegaba a Londres hacia el 20 de abril. Aunque no había constancia gráfica, dos eran las pistas claras de que había abandonado su casa de Los Ángeles por un tiempo. Por un lado, las fotografías conseguidas por 'The Sun' que mostraban a una cuidadora de mascotas paseando a los dos perros de Doria cerca de su casa. Por otro, el hecho de que la profesora de yoga hubiera anulado las clases que imparte en una residencia de ancianos. Unas señales que se relacionaban directamente con la inminencia del parto de Meghan Markle, que tenía lugar el 6 de mayo.
Ha sido el 'Daily Mail' quien ha conseguido las primeras fotos de Doria Ragland en Los Ángeles, paseando de nuevo a sus perros y recuperando su rutina. Una vuelta a casa que llega un mes después de su llegada a Londres. Y en todo este tiempo, solo ha habido una imagen de la madre de Meghan Markle en Windsor, ya que fue una de las protagonistas de la fotografía distribuida por los duques de Sussex para mostrar el primer encuentro entre la reina Isabel II y el duque de Edimburgo con el pequeño Archie.
Y parece que unos se van y otros llegan, porque ha dado la casualidad de que a la vez que Doria Ragland ha regresado a Los Ángeles, otra de las incondicionales de Meghan ha cogido un avión para ir a conocer a su primer hijo. Según 'The Sun', Jessica Mulroney fue vista en el aeropuerto de Toronto cogiendo un avión rumbo a Londres junto a su hija Ivy, que formó parte del cortejo infantil en la boda de los duques de Sussex. Madre e hija hacían las maletas hace unos días -tal como pudimos ver en el Instagram de la estilista-, preparadas para conocer al pequeño Archie y respetando el tiempo que la abuela Doria ha estado con el niño. Así, aunque en Frogmore Cottage hay espacio y servicio de sobra, han evitado dar más trabajo a los papás primerizos.
Parece que finalmente Doria Ragland no se muda al Reino Unido. Ni siquiera va a estar varios meses junto a su hija, tal y como aseguraban algunos medios británicos unos meses antes de que Meghan Markle se convirtiera en mamá. Exactamente cuatro semanas es el tiempo durante el que la suegra del príncipe Harry se ha instalado en Frogmore Cottage para esperar la llegada de su primer nieto y ayudar a la pareja en sus primeros días como felices papás. Así, con su vuelta a casa demuestra que su hija no tenía intención de que se mudara al Reino Unido tras el nacimiento del niño, una noticia que fue muy criticada por los detractores de Meghan, por el posible gasto que podría ocasionar en las cuentas públicas.