Guillermo de Holanda, de profesión piloto: el generoso gesto con un pasajero

Además de ser el rey de Holanda, Guillermo de Orange también cuenta con otra profesión que puede poner en su currículum, la de piloto, que sigue ejerciendo dos veces al mes. Lo hace siempre con la compañía KLM, la aerolínea holandesa, sin que normalmente trascienda que es el marido de Máxima de Holanda el que pilota la nave. Pero en esta ocasión, no solo se ha sabido que Guillermo pilotó un vuelo que cubría el trayecto entre Ámsterdam y París, sino que el rey ha sido el protagonista de un más que generoso gesto con un pasajero.

Nos situamos a principios de semana en el aeropuerto de Schiphol, en la capital holandesa. El vuelo con destino a París, que casualmente capitanea el rey Guillermo, sufre overbooking, por lo que no caben todos los pasajeros que tienen billete. La mala suerte quiere que solo sea uno el pasajero afectado, lo que pone en un verdadero aprieto a la tripulación. El monarca, máximo responsable del vuelo, toma una curiosa decisión, para alegría del viajero: lejos de hacerle quedarse en tierra, decide que vuele en la propia cabina de mando, junto a él y su copiloto, en un asiento adicional.

El gesto ha sido muy alabado en redes sociales, aunque también ha generado cierta polémica, ya que por cuestiones de seguridad, nadie ajeno a la tripulación puede entrar en la cabina, algo que era muy habitual antes del 11-S. Lo cierto es que, por mucho que ejerza de piloto, Guillermo sigue siendo el rey de Holanda, por lo que, aunque sea una actividad privada, su seguridad está más que cubierta durante sus horas de vuelo. Tampoco el rey fue muy alabado hace dos años, cuando explicó que había tomado un vuelo de Emirates para un viaje oficial porque era "más barato y rápido" que la compañía holandesa, algo que no gustó mucho ni en KLM ni en el país en general.

La última vez que pudimos verlo a los mandos de un avión fue durante la visita oficial que realizó con Máxima a la India, el pasado octubre, cuando realizó las maniobras de aterrizaje en el aeropuerto donde se les recibió. Coincide que el avión oficial de las fuerzas aéreas en el que hacen sus viajes está operado también por KLM, ya que es en la que tiene licencia, por lo que la comitiva fue testigo de como su invitado de honor era el propio piloto del avión oficial, en unas curiosas imágenes que no pasaron desapercibidas.