Castaño y con ojos claros: así es el nuevo miembro de la familia de Kate Middleton

La familia Middleton crece. Pero no. Aunque los rumores de embarazo persiguen a Kate Middleton constantemente, al igual que a su hermana Pippa, en este caso el que se ha convertido en feliz papá de familia numerosa es James. Pero no. Aunque seguro que tanto sus padres como sus hermanas están deseando que sea padre, no es que haya decidido celebrar su unión con la francesa Alizee Thevenet lanzándose a la paternidad. La familia que ha aumentado es la canina, con la unión de otro perro a los cinco que ya le acompañan en cada andadura.

El nuevo miembro se llama Nala, es un cachorro con pelo castaño y ojos claros, y es la hija de Zulu y nieta de Ella, dos de las perras con las que comparte su vida y de las que se declara feliz papá en sus redes sociales. Precisamente, ha sido el mismo medio que ha utilizado para presentar a la que es su nueva 'hija', coincidiendo con sus diez semanas de vida, bajo la promesa de compartir muchas más aventuras junto a los canes de aquí en adelante.

James Middleton nunca ha ocultado lo importantes que han sido las mascotas en su vida. Los perros le ayudaron a lidiar y superar sus problemas de depresión, de los que ha hablado abiertamente para intentar ayudar a personas que se encuentran en su misma situación y que no ven la salida, una sensación que él conoce muy bien. De hecho, es el embajador de Pets as Therapy, una organización que benéfica que utiliza a los canes como terapia en pacientes de hospital, centros de acogida o colegios.

Pero es que, además, también una de sus perras fue la responsable de que hoy Alizee y James estén prometidos, ya que se conocieron cuando la analista francesa fue a acariciar a Ella, una de sus cocker spaniel. Después, él la invitó a tomar una copa. Y lo demás ya es historia. Así que, sin duda, el hermano de Kate Middleton tiene mucho que agradecer a su familia perruna, por lo que sus mascotas hubieran tenido un papel muy importante en la boda de la pareja, prevista para estar primavera, pero que ha tenido que ser cancelada a causa del coronavirus, un contratiempo que ni siquiera sus queridos perros han podido evitar.